Las tres patronales del sector del metal, Asime, Atra e Instalectra y los sindicatos CIG y UGT, han firmado este viernes el convenio colectivo del sector metal para empresas sin convenio propio de la provincia de Pontevedra.
Como ya había anunciado en su momento, CCOO ha rechazado firmarlo después de que los afiliados decidiesen en asamblea que el peracuerdo alcanzado entre las partes no satisfacía su exigencias.
El nuevo convenio estará vigente hasta el final de 2025 y contempla un incremento salariale del 9% (3% en cada uno de los años), con hasta un máximo de 2% adicional anual si el IPC estuviese por encima de la subida acordada. Asimismo, las empresas deberán hacer efectivos los atrasos del año 2023 antes del próximo 31 de octubre.
En cuanto a la reducción de la jornada laboral anual se estipula en 16 horas (8 en 2024 y otras 8 en 2025) y un día adicional de vacaciones, sumando un total de 23 días hábiles.
En materia de contrataciones, aquellas que se hagan por picos de trabajo puntuales, conforme a la modalidad de contrato por circunstancias de la producción que contempla la reforma laboral, tendrán una duración de hasta doce meses, no de seis como hasta la fecha.
Otra de las medidas encaminadas a hacer un sector más atractivo y paliar la falta de trabajadores es el compromiso de ambas partes a establecer un umbral salarial en los contratos formativos, que será de lo correspondiente al SMI para los de obtención de la práctica profesional y del SMI +10% en el segundo año para los de formación en alternancia o FP dual.
Satisfacción
“Después de tanto sufrimiento y de hechos conflictivos que han sucedido durante los días de huelga, especialmente la actuación violenta de piquetas en empresas y los actos vandálicos sucedidos en los alrededores del Ifevi, finalmente se ha llegado a un buen acuerdo para trabajadores y empresarios, teniendo en cuenta que, para la parte empresarial, el mayor valor en la negociación colectiva siempre es esa paz social y diálogo tranquilo, una calma imprescindible para poder ser competitivos en un entorno como el actual, no solo a nivel nacional sino también internacional, entorno en el que hay una competencia feroz», ha dicho la patronal en un comunicado.
«Hay que ser rigurosos e intentar siempre contar con un marco laboral competitivo que garantice la consecución de pedidos y la carga de trabajo para el sector”, ha añadido.
Inciden en que este convenio sigue siendo un referente para empresas y trabajadores a nivel estatal, siendo uno de los principales, no solo en Galicia sino también fuera, afectando a más de 33.000 trabajadores de 3.700 empresas de un sector que representa el 20% del PIB de Galicia.
“Lo que no podemos pretender es tener convenios idénticos por toda España, obviamente cada uno contempla sus casuísticas, pero los trabajadores pueden estar tranquilos porque se mejoran sus derechos y los empresarios también tienen un marco laboral estable y competitivo», afirman.