El grupo automovilístico Stellantis obtuvo en 2023 unas ganancias netas de de 18.625 millones de euros, un 11% más que los 16.779 millones de euros del ejercicio anterior, según los datos presentados por la compañía este jueves.
Stellantis ha señalado que los beneficios obtenidos en 2023 suponen un nuevo récord para la compañía tras el de 2022, como también lo han sido los ingresos netos y los flujos de caja libres industriales.
«Estos resultados financieros récord de hoy son la prueba de que nos hemos convertido en un nuevo líder mundial en nuestro sector y de que seguiremos siendo sólidos como una roca de cara a un turbulento 2024», ha explicado el consejero delegado de la firma, Carlos Tavares.
Los ingresos netos de Stellantis se situaron en 189.544 millones de euros en 2023, un 6% más que los 179.592 millones de euros registrados en 2022.
Asimismo, el beneficio operativo del fabricante automovilístico se situó en 22.376 millones de euros, un 10% más que los 20.276 millones de euros obtenidos un año antes.
Eleva el dividendo un 16%
Por otro lado, Stellantis ha propuesto un dividendo de 1,55 euros por acción ordinaria, lo que supone un aumento del 16%, aproximadamente, respecto al año anterior, que aún está pendiente de la aprobación de los accionistas.
Además, el grupo automovilístico ha anunciado que ejecutará este año un programa de recompra de acciones en el mercado abierto de 3.000 millones de euros, que incluye 500 millones de acciones recompradas.
Previsiones para este año
La dirección de Stellantis ha señalado una serie de factores que podrían crear un «entorno favorable» para los ingresos en 2024, como la reducción de las limitaciones logísticas y de suministro, la estabilización y posible reducción de los tipos de interés y los beneficios de la ampliación prevista de la oferta de productos de la empresa.
Asimismo, la compañía ha reiterado un compromiso «mínimo» de margen de ingresos operativos ajustados de dos dígitos en 2024, así como un flujo de caja libre industrial positivo, a pesar de las incertidumbres macroeconómicas.