El pleno de la corporación municipal del Ayuntamiento de Vigo ha aprobado este martes en una sesión extraordinaria una modificación presupuestaria para destinar 1,8 millones de euros adicionales del remanente de tesorería al programa de conciertos de verano y al festival O Marisquiño.
La propuesta ha salido adelante con el voto favorable del grupo de gobierno, del PSOE, y la abstención de los partidos de la oposición (PP, Marea de Vigo y BNG).
El concejal de Hacienda, Jaime Aneiros, ha defendido esta medida porque “no es exclusivamente para fiestas”, sino que sirve para apoyar el tejido productivo y la economía de la ciudad. Al respecto, ha destacado que eventos singulares como los conciertos de Castrelos o el festival O Marisquiño sirven para “dinamizar” el sector servicios: hoteles, hostelería y restauración o comercio local.
Todo ello frente a una Xunta de Galicia que, en el caso de O Marisquiño, “este año no está moviendo ni un dedo” para apoyarlo, y que tampoco destina recursos a promocionar Vigo, como sí hace con Santiago. Además, ha añadido, el Ayuntamiento olívico puede permitirse el uso de remanentes por su “solvencia financiera”.
Jaime Aneiros ha insistido en que los eventos apoyados por el Ayuntamiento tienen un “efecto tractor” en la ciudad y sirven para potenciar la “marca Vigo”.
Oposición política
Mientras, el grupo municipal Marea de Vigo ha apuntado que no se opone al uso de remanentes, pero ha recordado que esos fondos pueden emplearse ahora porque no se ejecutaron en su momento, y ha añadido que hay “muchas otras cosas importantes” a los que destinarlos.
En ese sentido, el portavoz del grupo, Rubén Pérez Correa ha criticado que no se destinen recursos para recuperar programas culturales como MoveVigo o Imaxina Sons, y ha insinuado que detrás del aumento de fondos para los conciertos no está el incremento de costes, sino la necesidad de financiar “el requisito de que sea el alcalde el que los presente”. “¿Será que estamos pagando los vigueses para que el alcalde salga a presentar a los artistas”?, ha preguntado, y ha denunciado que se usen remanentes para pagar la “campaña electoral permanente” de Abel Caballero.
Por su parte, el concejal del BNG, Xabier Pérez Igrexas, ha planteado un voto particular, proponiendo que se destinen 5,4 millones de euros adicionales de remanentes para otras actuaciones culturales (programas de artes, refuerzo de la red de bibliotecas con 5 nuevas instalaciones, recuperación del Archivo Pacheco, recuperación del programa Súbete ao Castro,…). Su propuesta ha sido rechazada por el PSOE.
Pérez Igrexas ha señalado que, aun compartiendo la apuesta por O Marisquiño o por las actividades culturales, el gobierno de Vigo debe destinar más recursos “para que haya más cultura, de verdad, y no solo más espectáculo”.
Finalmente, Alfonso Marnotes, portavoz del PP, ha aprovechado su intervención para volver a despedirse de la Corporación, y para reivindicar los 4 años de trabajo de su grupo, que se irá “con la cabeza bien alta”.
Modificación presupuestaria
Según se recoge en el expediente de esta modificación de crédito, el Plan de Contratación de 2023 prevé una partida de 700.000 euros “para actuaciones artísticas singulares” pero el departamento de Festas ha constatado que el gasto de los conciertos de Castrelos y de la Semana de Jazz y Música Clásica que se celebra en la plaza de Compostela asciende a casi 2 millones de euros.
Por ello, se solicita incrementar la financiación de esta partida en 1,3 millones de euros. Entre los argumentos esgrimidos para explicar este desfase presupuestario está el incremento de los costes de contratación, derivados del escenario de inflación, el aumento de precio de las materias primas y otros factores.
Con respecto al festival O Marisquiño, la aportación del Ayuntamiento al evento se hace a través de un convenio con la Diputación, de manera que la ayuda municipal es de 420.000 euros, más otros 180.000 euros que aporta el organismo provincial.
Sin embargo, ha señalado el departamento de Festas, el traslado de pruebas al entorno de Samil y otros cambios han incrementado los costes de la organización, en unos 540.000 euros. Así, la estimación es que el acondicionamiento de uno de los aparcamientos de Samil para las pruebas de skate y BMX supone 100.000 euros; el acondicionamiento de parte de la Avenida de Samil para la prueba de ‘dirt jump’ supone otros 150.000 euros; a ellos se suman otros 140.000 euros de gastos de logística y 30.000 euros de gastos de seguridad; y, finalmente, la celebración de la ‘batalla de gallos’ en la Porta do Sol supone un coste adicional de 120.000 euros.