“Esta obra dará la vuelta al mundo, porque en España solo hay dos como este y en Europa muy poquitos”, aseguraba este jueves el alcalde, Abel Caballero, durante una visita a las obras. El ascensor inclinado parte de la calle Menéndez Pelayo y salva el talud de Juan Ramón Jiménez para desembocar en la Avenida das Camelias.
El elevador se está construyendo en el Parque Tecnológico y Logístico de Valadares (PTL) por parte de una empresa que emplea a 50 ingenieros y que está especializada en el diseño de ascensores para cruceros. “Tiene que estar diseñado exactamente con la pendiente de la zona porque se trata de una obra singular, en una zona muy estrecha, con roca y entre viviendas. El conjunto de la obra se hace en Vigo y significará una tarjeta de presentación de estas empresas por el mundo”, afirmó Caballero.
La obra del ascensor se adjudicó el pasado 20 de enero en 490.000 euros y tiene un plazo de ejecución de siete meses, por lo que debería estar finalizada a finales del próximo verano. El elevador recorrerá una distancia aproximada de 32 metros salvando una altura de 20 metros entre Menéndez Pelayo y la Avenida das Camelias. La actuación abarcará un total de 523 metros cuadrados en los que el elevador tendrá una parada intermedia, desde la cota de 45 metros a la de 65 metros de altura, permitiendo a medio camino el acceso a varios locales.
La capacidad de carga del ascensor será de 25 personas en cada viaje, por lo que podrá transportar a 1.700 personas a la hora. Será la segunda actuación municipal dentro del proyecto Vigo Vertical, que tiene el objetivo de facilitar la movilidad de los peatones entre la parte baja de la ciudad y el monte de O Castro.
Última fase escaleras mecánicas
“Se trata de un cambio notable, es el segundo gran desarrollo del Vigo Vertical, el primero fue las escaleras mecánicas, cuya segunda fase empezará en breve, y seguiremos en esta línea para acabar con las dificultades orográficas de la ciudad”, explicó el regidor antes de añadir que “es una inversión social y económicamente muy rentable, porque conecta dos áreas de Vigo separadas por la orografía. Será posible subir desde Torrecedeira a Camelias, una nueva forma de entender la movilidad en la ciudad”.
Respecto a la segunda fase de las escaleras mecánicas de Porta do Sol, Caballero señaló que el inicio de la obra está pendiente del visto bueno del departamento de Patrimonio Histórico. “En cuanto esté listo empezaremos de forma inmediata, será pronto”, avanzó el alcalde.