La construcción de la nueva entrada a la AP-9 desde la calle Lepanto, que sustituirá al extinto ‘scalextric’, ha dado en las últimas horas un paso muy importante y significativo. El túnel que se está creando ha conectado los dos extremos que se están perforando. Por un lado, se había iniciado la excavación desde la propia ciudad de Vigo. Por el otro, desde la autopista. Y, tal y como informó VIGOÉ, ambas partes se encontraron este fin de semana. Los operarios hicieron los primeros agujeros en el último muro que las separaba y este lunes el alcalde, Abel Caballero, quiso seguir las labores que restan en primera persona.
El regidor vigués presenció cómo las máquinas seguían aumentando las dimensiones del agujero que se había creado los días anteriores. Un momento que él mismo esperaba con ganas. Esta conexión no supone la apertura del túnel, ni mucho menos, puesto que solo podrá ser inaugurado cuando la infraestructura esté al completo. Las previsiones apuntan a que los accesos al conjunto del complejo y la autopista a través del túnel no estarán acabados hasta dentro de varios meses.
Recordemos que en los alrededores de las nuevas estaciones de tren y autobús se construyen dos túneles diferentes, desde la calle Lepanto y desde la Autopista del Atlántico. Por un lado, el de entrada a la estación de tren. Por otro, el que dará acceso a la estación de autobuses. Ambos serán de entrada también al centro comercial y a los muelles de carga en su parte final. Los pasos subterráneos discurren sobre suelo competencias de dos administraciones diferentes, Xunta y Concello de Vigo, por lo que las obras se realizan de forma paralela.
Mientras tanto, en superficie se ha iniciado el asfaltado de las calles Lepanto y Baixada á Estación, cerradas desde enero. Una vez que terminen estas labores, que durarán unos «días», según Caballero, se reabrirá el tráfico para poder ir desde la Gran Vía hasta García Barbón pasando por Alfonso XIII. «Queremos acabar con el atasco de la obra del Vialia, reabriremos el tráfico sin túnel, que va a tardar más», indicó. En la zona, los operarios también comenzaban a arreglar zonas verdes, jardines y la rotonda central este lunes.
Una vez que se retome la circulación se permitirá entrar desde Gran Vía por Lepanto y seguir hacia Alfonso XIII. «Ya sin molote», recordó Caballero respecto al paso elevado que ya fue derribado y en el que quedaban atascados camiones de forma habitual.
Habrá que esperar un poco más, hasta el 30 de septiembre, para poder seguir recto hacia el centro comercial Vialia y la Praza da Estación. Para acceder al nuevo complejo se podrá llegar en coche a través de Lepanto y de Vía Norte.