El inicio de las obras en Barrio do Cura es ya una realidad. Y las zonas valladas para poder hacer frente a los primeros trabajos de excavación y movimiento de tierras ya tienen a sus primeros afectados: los turistas y los vecinos del Casco Vello de Vigo.
Y es que este martes, operarios de la empresa DFR -que forma parte de la UTE Barrio do Cura junto a Construcciones San José- se afanaban en colocar y ‘cercar’ por completo una de las zonas públicas que supone un punto de encuentro para los grupos de turistas que, día tras día, recorren las calles de la ciudad: el cruceiro de la zona alta de Poboadores.
De este modo, el amplio vallado se ‘come’ una parte muy importante del barrio histórico -aunque quizá poco conocida para muchos locales- que es, además, un punto de parada obligatorio para los guías turísticos que ofrecen sus ‘free tour’ por la zona antigua de Vigo.
El cruceiro, que se encuentra en una pequeña plaza debajo del Paseo de Alfonso y que es obra de Silvino Silva, está situado justo al lado de la que está previsto que sea una de las principales entradas y salidas de la obra de Barrio do Cura: en la misma curva de la calle Poboadores que asciende hasta el mirador.
Pero no se queda aquí porque la calle, además, sigue perdiendo una decena de plazas de aparcamiento que estaban reservadas para los residentes del Casco Vello, siendo otros de los grandes afectados por el inicio de estos trabajos para convertir la zona en un amplio y lujoso complejo residencial que, sin duda, remozará por completo la imagen del barrio histórico.
Con todo, este martes, cintas y vallas de obra -junto a carteles de prohibido aparcar y el consiguiente documento autorizando la ocupación de la vía pública- dominaban una de las principales arterias de la zona vieja que ya ha sufrido una importante reducción de los escasos lugares que los residentes del Casco Vello tienen para dejar sus vehículos.
Y a ello hay que sumarle la imagen del mismo Paseo de Alfonso, que se encuentra completamente vallado desde marzo del año 2019 sin ofrecer desde el Concello de Vigo ningún tipo de solución para los vecinos y transeúntes de una de las zonas más visitadas de la ciudad.
Esta situación, además, se ha visto acrecentada con la eliminación de la bolsa de aparcamiento que se encontraba en la parte inferior del paso y en plena subida de la calle Poboadores por el «mal estado» y el «peligro» de caídas de cascotes desde la propia balaustrada del mirador del paseo.
Con todo, los vecinos del barrio alto del Casco Vello pidieron soluciones al Ayuntamiento e impulsaron, incluso, una recogida de firmas para intentar buscar alternativas a un problema que cada día se acrecienta más, teniendo en cuenta, además, que el número de residentes en la zona histórica de la ciudad crece a pasos agigantados con las nuevas promociones que el Consorcio Casco Vello de Vigo -y donde el propio Concello tiene voz y voto- está sacando al mercado.