Las obras de las rampas mecánicas de la Gran Vía no terminarán por completo hasta la segunda quincena de noviembre. Así pues, los vigueses tendrán que esperar más de lo previsto para poder probar las nuevas cintas que permitirán subir desde el cruce de María Berdiales hasta Venezuela sin apenas tener que caminar.
Abel Caballero, que en su día había fijado la inauguración de la reforma del bulevar para agosto, ha informado este miércoles de un nuevo cronograma de plazos. En la primera semana de septiembre se abrirán al tráfico un carril de subida y dos de bajada. Y ya a finales de ese mismo mes se recuperará la normalidad en la circulación al completo.
Entre las curiosidades del nuevo pavimento se encuentra el uso de un material que absorbe el CO2 que emiten los vehículos. Un material (GeoSilex) que ya se empleó en 2017 en la humanización de la calle Estorniño y que lleva años patentado en el mercado.
Además, se prevé recuperar la vegetación en la zona a finales de octubre. Aquí radica uno de los puntos más polémicos de la obra, ya que el año pasado se retiraron 24 árboles de gran altura. Caballero se ha comprometido a plantar 162 árboles y arbustos “de mejor porte”. El alcalde insistió en que “los anteriores árboles amenazaban con caer” y estaban “huecos y llenos de hongos”.
Finalmente, en la segunda quincena de noviembre se daría el remate a la reforma y a partir de ahí se podrían utilizar los 205 metros de rampas mecánicas que estarán disponibles. Además, hay que recordar que en sentido descendente se podrá caminar bajo una zona cubierta que protegerá de la lluvia.
Una “plaza” y un “adorno”
Entre las novedades que encontrarán los vigueses en su tránsito por la nueva Gran Vía se hallan una “nueva plaza” con bancos y zona verde junto al paso de peatones situado en las proximidades de la calle Ecuador. También más abajo se instalará un “adorno” escultórico.
Caballero ha recordado este miércoles que ya ha dado órdenes para que se retoque el proyecto paralizado por Patrimonio para instalar cintas mecánicas en los tramos superiores, entre la calle Venezuela y el túnel de la plaza de España.