El alcalde de Vigo, Abel Caballero, mantiene su cruzada para que Vigo sea sede del Mundial 2030 tras la información publicada por el periódico ‘El Mundo’ de que hubo dos listas diferentes de clasificación de las sedes, estando Balaídos incluido en la primera de ellas.
Este lunes, y a través de un audio remitido a los medios de comunicación, volvió a poner el foco en el actual presidente de la Federación Española de Fútbol, Rafael Louzán, quien, en el momento de la elección de las sedes del Mundial 2030, era vicepresidente del organismo.
Así, tras relatar la «relación de correos» entre Louzán y la «señora Tato» -directora de la candidatura que finalmente fue cesada- así como las últimas versiones del resto de los miembros de la comisión encargada de elegir las ciudades españolas, el regidor vigués insistió en el «escándalo como no hubo otro» que supone lo que está pasando con lo que ya define como «proceso de expulsión de Vigo».
«A partir de ese email Vigo dejó de ser sede del Mundial», reprocha Caballero, haciendo alusión a los correos remitidos entre María Tato y Rafael Louzán. «Es tremendo», insistió el alcalde de Vigo, añadiendo que todo apunta siempre al presidente de la RFEF.
«Todas las informaciones que se reciben siempre señalan a Louzán. Detrás de que Vigo haya sido despojada de ser sede del Mundial siempre está Louzán», apuntó el regidor, quien le volvió a reclamar la incorporación de la ciudad como sede. «Tiene que decir que Vigo es sede del Mundial. Está obligado porque era sede en el listado inicial y original», consideró.
Así, calificó de «escándalo» la actual situación, algo que, según valoró, «está deteriorando la Marca España» y «arrastrando el prestigio de la RFEF», dijo.
«Es un clamor en Vigo y en toda España y Louzán sigue callado. Tiene que hablar y decir que Vigo es recuperada como sede del Mundial del año 2030. Y ya tarda», espetó. «Ahí permanece callado y escondido y tiene que pedir perdón e incluir a Vigo como estaba en la primera lista», remató.