Abel Caballero ha salido este martes al paso del conflicto surgido en el seno de Vitrasa, cuya dirección ha avisado a la plantilla de que no le abonará la paga extra de Navidad. Además, la concesionaria del autobús urbano de Vigo también ha alertado de que está en riesgo la nómina de diciembre. El alcalde ha negado que exista una deuda con la empresa, tal y como afirmaba la CIG. Por otro lado, sí ha reconocido que aún no se ha cerrado el acuerdo para indemnizar a la compañía por la brutal caída de viajeros que ha sufrido este año, según alertó inicialmente el grupo municipal de Marea de Vigo.
“Nosotros no tenemos que pagar ningún canon a Vitrasa. ¿Qué es eso? Eso no existe. No sé de qué me está hablando”, respondió el regidor vigués a las preguntas de la prensa. “No tenemos deuda [con Vitrasa], cosa distinta es que [la concesionaria] tenga un déficit y nosotros debamos cubrirlo”, añadió.
A este respecto, Caballero recordó que “estamos en el año todavía” y, por tanto, ve margen para llegar a un punto de encuentro sobre la liquidación de 2020. “Si Vitrasa tiene un déficit, veremos cómo es y de qué forma se solventa. Estamos en eso”, informó. El alcalde también apuntó que no sería estrictamente necesario acordar el importe a compensar antes del 31 de diciembre.
Aunque ambas partes ya manejan cifras, el primer edil olívico se negó a facilitarlas. En este sentido, el regidor remarcó que Vitrasa es libre de presentar un déficit determinado pero compete a los técnicos municipales revisar esas cuantías. “Los dineros públicos hay que medirlos mucho porque son de la gente”, señaló.
Durante su intervención, Caballero no se refirió en ningún momento al conflicto laboral en sí mismo. Es más, eludió responder sobre una posible sanción a la concesionaria o una eventual resolución del contrato en caso de que incurra en impagos con su plantilla. Tampoco dirigió ningún mensaje de tranquilidad hacia el personal de la empresa.
Por su parte, los tres partidos de la oposición han exigido al Gobierno local que resuelva la situación obligando a Vitrasa a pagar los salarios correspondientes a sus trabajadores, tanto la paga extra como las futuras nóminas.