Abel Caballero sigue llevando al centro del debate político la creación de una alternativa a la A-55. El alcalde de Vigo ha fijado este miércoles su atención en la patronal, que no se ha pronunciado sobre la propuesta del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Este planteamiento pasa por no construir la variante que conectaría la ciudad olívica y O Porriño a través de un túnel, sino que se opte por liberalizar el peaje de la autopista AP-9. Una opción que ha hallado la oposición frontal del regidor olívico.
Caballero ha aludido al Círculo de Empresarios de Galicia, a la Cámara de Comercio y a la Confederación de Empresa de la Provincia de Pontevedra. También a la Federación Provincial de Empresarios del Transporte. Todos con sede en Vigo. “No los escucho, quiero escucharlos, quiero saber qué opinan”, ha declarado este miércoles el alcalde.
Por ello, el regidor olívico ha “puesto en conocimiento” de todas estas entidades la situación porque “a lo mejor no la conocen”. “Me tienen a su disposición para explicárselo en detalle si no la conocen”, ha añadido.
Caballero ha retirado que considera “gravísimo” y “un desastre” para Vigo que no se construya esta nueva autovía en túnel, cuyo coste correría a cargo del Gobierno de España. El alcalde también atribuyó la “decisión” de crear esta alternativa a Pedro Sánchez, aunque en realidad fue anunciada por Mariano Rajoy en 2018.
Estas declaraciones llegan un día después de que el pleno de la Corporación Municipal aprobara una moción para instar al presidente de la Xunta que rectifique su propuesta de liberar de peaje la AP-9 entre Vigo y O Porriño en lugar de construir este nuevo enlace. Aunque la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, trasladó a Feijóo su intención de analizar este planteamiento, Caballero asegura que el Gobierno de España no lo contempla.