El Monumento al Trabajo no se mueve de la Gran Vía. Al menos, por ahora. Abel Caballero ha renunciado a cambiar de sitio la obra de Ramón Conde, popularmente conocida como Los Rederos. Así lo ha desvelado el propio alcalde en el programa que cada semana protagoniza en Televigo. Según anunció, el Concello de Vigo presentará un nuevo proyecto para humanizar la calle García Barbón sin incluir ese deseado traslado desde el bulevar de la avenida hasta la rotonda en la que confluyen García Barbón, Isaac Peral y la entrada a la autopista AP9.
A este respecto, hay que recordar que Patrimonio había autorizado la obra pero con pegas. Entre ellas, el cambio de la escultura presente en esa glorieta. Esta prohibición provocó el enfado del regidor vigués, que aseguró que de una manera u otra conseguiría su propósito, a pesar del rechazo popular que genera retirar el Monumento al Trabajo de la Gran Vía, que es incompatible con la instalación de las rampas mecánicas.
Después de año y medio de conflicto, Caballero dio orden esta semana al concejal de Fomento, Javier Pardo, para que remita a Patrimonio un plan alternativo sin ese traslado. De esta forma, busca poder terminar la humanización para luego, en otra fase, seguir hasta Sanjurjo Badía. “Ya me harté. Y como ya me harté, di instrucción de presentar el proyecto sin la glorieta”, reveló.
No obstante, el alcalde advierte de que esta renuncia será temporal, según sus previsiones. “Ya cambiaré la glorieta cuando se vaya Feijóo. Cuando lo echemos de la Xunta, el siguiente se encargará de hacer las cosas bien”, declaró. Así, Caballero supedita la permanencia de Los Rederos en su actual ubicación a lo que suceda en las elecciones autonómicas del 5 de abril, dando por hecho que la decisión tiene un trasfondo político y no obedece exclusivamente a los criterios de los técnicos de Patrimonio.