Ante los medios de comunicación, el alcalde vigués volvió a utilizar la «fama» del popular arbusto y además de anunciar que pronto aumentará la familia, anunció que no se moverá de su ubicación actual en la Porta do Sol, que en un principio iba a ser provisional pero que finalmente será la definitiva. «Nos lo pide todo el mundo», remarcó tras asegurar que la dinoseta «no se quiere ir de ahí, ya nos lo dijo por activa y por pasiva».
Encantado por la popularidad del arbusto y tras recordar que «es lo más fotografiado en Vigo desde el árbol de Navidad», añadió que el Concello ya trabaja tanto en su mantenimiento como en garantizar su supervivencia.
Para ello, se está trabajando para reparar la cola del arbusto, muy deteriorada, y en la instalación de un photocall que permita a los jóvenes -y los que no lo son tanto- hacerse selfies con la dinoseta sin tener que encaramarse a la base ni, mucho menos, a la espalda del T-Rex.
«Es una planta muy sensible y en una parte del lomo se veía el armazón metálico», remarcó el regidor vigués, que admitió que se está buscando un sistema «que al menos señale que no se puede subir allí». «No es fácil conseguirlo», dijo.