«En el Casco Vello tenemos que medir mucho qué tráfico tiene y cómo lo tiene, pero no se puede saturar». Es la respuesta del alcalde Abel Caballero sobre la eliminación de plazas para residentes en el barrio histórico, sobre todo en la zona de Poboadores, tras la delimitación que se hizo hace meses por el «riesgo de desprendimientos» del voladizo del Paseo de Alfonso.
Cuestionado al respecto en el inicio de las obras de Barrio do Cura este martes -obra que también ha hecho perder algunos espacios más para aparcar- el regidor apuntó que el nuevo y futuro ámbito residencial ofrecerá un aparcamiento público con 300 plazas. «Mucho más de lo que había», matizó Caballero.
Sin embargo, y a raíz del vallado de la zona para residentes de Poboadores y sobre si se les daría alguna alternativa a los vecinos mientras durasen los trabajos que apuntan a un plazo de 3 años, el alcalde fue categórico: «Hay una obra y cuando hay una obra hay dificultades», señaló.
Con todo, fue más allá para plantear ya una nueva visión de la vida en el casco histórico poniendo el foco en el tipo de tráfico que se articula por sus principales arterias especificando, además, que se trata de una zona de bajas emisiones y eminentemente peatonal, lo que significa que «es la garantía de una calidad de vida distinta», subrayó.
Pero no se quedó ahí ya que señaló que el no tener aparcamiento es algo que los vecinos y vecinas del Casco Vello conocen sobradamente cuando deciden irse a vivir a la zona antigua.
«Sabes que no tienes un garaje para tu coche. Y lo elegiste, elegiste irte para allí», soltó el regidor, matizando que, aún así, se seguirán «reservando» plazas de aparcamiento.
«Pero no se puede saturar», insistió. Y siguió: «Porque entonces cambiamos durante un tiempo lo más sensible y lo más importante del Casco Vello, que es para vivirlo, paseando», sentenció, dando por zanjado y completamente resuelto el asunto, pero sin ofrecer una alternativa a uno de los verdaderos problemas que los residentes de la zona antigua viven día tras día hasta el punto de llegar a ‘autogestionarse’ ellos mismos las escasas plazas que quedan disponibles.
Un problema que cada vez será mayor habida cuenta de las nuevas y próximas promociones que el Consorcio Casco Vello de Vigo (CCVV) ya tiene en marcha y que, como informó VIGOÉ, han llamado la atención de casi 600 personas que se han inscrito en los últimos procedimientos para resultar adjudicatarios de alguna de las nuevas 7 viviendas completamente acabadas y rehabilitadas por el organismo.
Obras en el Paseo de Alfonso
Además, el alcalde explicó este martes que la reparación de la estructura del voladizo del Paseo de Alfonso, que se encuentra vallado desde marzo del año 2019, afeando así una de las zonas más turísticas y visitadas por vigueses y foráneos, «no depende» de la obra de Barrio do Cura.
Sin embargo, hace unos meses, el gobierno de Abel Caballero le aseguró al grupo municipal del PP que dicha reparación estaba «vinculada al desarrollo del Barrio do Cura«, cuestión que, en aquel momento, hacía sospechar a los populares que el paseo seguiría “clausurado muchos años más”.
Pero este martes, el regidor especificó que desde el Concello «está en marcha» y ya se está trabajando en solucionar el problema «diseñando un sistema para hacer contrapeso», informó, sin concretar cuándo podría estar resuelto.
«Ahí hay una parte que es un voladizo y tenemos que asegurar que tiene contrapeso para que no caiga», explicó. «Felizmente lo detectamos a tiempo y garantizamos toda la seguridad en el paseo con las vallas».