“Todo señala que no se van a celebrar ni el Carnaval ni la Reconquista”. En estos términos se ha expresado este jueves el alcalde de Vigo, Abel Caballero, al ser preguntado por las perspectivas del Concello con estas dos fiestas populares. Sólo falta un mes para el Entroido y un mes y medio para expulsar a los franceses de la ciudad. Y ante el actual escenario epidemiológico el regidor olívico ve inviable desarrollar ambos festejos en las fechas previstas.
“La perspectiva es muy mala. Estamos en un repunte [de contagios]”, ha recordado Caballero, que en todo caso deja la puerta abierta a posponer la Reconquista. Así como el Carnaval tiene un contexto muy limitado, tanto el Ayuntamiento como los organizadores han planteado esta opción en las reuniones que han mantenido. “Todo se puede estudiar”, señaló el alcalde.
Tal y como avanzó VIGOÉ, la asociación vecinal del Casco Vello no baraja una nueva cancelación del evento. En 2020 ya no se pudo celebrar y la semana pasada estaban sobre la mesa dos alternativas: organizar una versión reducida o mover la fiesta en el calendario. Ahora, Caballero parece descartar la primera opción ante la llegada de la tercera ola, que en todo caso estaría más controlada a finales de marzo. La previsión de las autoridades sanitarias es alcanzar el pico a finales de enero o principios de febrero.
“Non desbotamos ninguna idea, o único que non contemplamos é non organizar a Reconquista este ano”, declaraba a VIGOÉ uno de las cabezas visibles de la organización, Fiz Axeitos. También se contemplaba cambiar ciertas ubicaciones en busca de espacios amplios, como se hizo con la Cabalgata de Reyes. Caballero, en esta ocasión, no ha sugerido ninguna idea novedosa como esa versión estática que se instaló en la Avenida de Castelao o como la creación de cuadrículas en las playas durante el verano.