El alcalde de la ciudad, Abel Caballero, ha vuelto a salir este jueves a la palestra para «defender Vigo» ante lo que considera un «ataque» desde la Federación Española de Fútbol (RFEF) «respaldado desde instancias políticas» para que Balaídos se quedase fuera del Mundial 2030.
En una amplia comparecencia ante los medios de comunicación, ha vuelto a insistir en la información publicada por ‘El Mundo’ y el «avance muy importante» que ha supuesto el cese de la directora de la comisión, María Tato, por lo que, según valora el regidor, «reconoce que se equivocó».
«Hubo una clasificación, la primera, la que concluye con las deliberaciones en las que estaba incluido Balaídos y reconoce que, apenas 24 horas después se cambia, como si no tuviera la más mínima importancia, y la señora Tato dice literalmente ‘me limité a corregir unos errores de interpretación al aplicar los criterios y no los hice sola'», recoge el alcalde, matizando que dicho cambio se hizo el 26 de junio del año 2024 «en una cafetería y con los otros dos miembros del comité, que lo niegan y dicen que no tuvo lugar la reunión».
Esto es lo que le sirve a Caballero para considerar «irrefutable» que el listado en el que estaba Vigo «se envía al señor Louzán» pero que, tras días con la polémica encima de la mesa, sigue sin hablar públicamente y dar explicaciones. «Está hablando todo el mundo menos Louzán, está callado», subrayó, insistiendo en conocer todo lo que pasó en el proceso por el que Vigo se quedó fuera.
En este sentido, exigió conocer todas las actas de las reuniones en las que se establece «esa modificación» así como «dónde se hizo la reunión y quienes estaban presentes». «Queremos tenerlas y saber por qué se excluyó a Vigo. Quiero tener todas las actas de esa reunión», insistió Caballero, que califica el tema de central porque es «capital para Vigo».
A los juzgados
Con todo, el regidor no descartó tomar otras medidas y acudir incluso a los tribunales. De hecho, avanzó que este mismo jueves encargó a la asesoría jurídica municipal que le informe sobre «las posibles opciones». «No descarto nada, voy a defender a la ciudad, a defender Vigo y enfrente hay un ataque de la Federación pero respaldado desde instancias políticas», señaló.
Al respecto, subrayó que Rueda no respondió cuando el propio alcalde le instó a que pidiera la publicación de los documentos y baremos que sirvieron para seleccionar las sedes.
Por contra, el gobierno local recibió una carta de un conselleiro (el titular de Presidencia, Justicia y Deportes, Diego Calvo) con referencias a la «falta de influencia» de la ciudad. «Habló de favoritismo», denunció Caballero, que también criticó que el PP de Vigo hubiera aludido a supuestas «carencias» de la candidatura olívica.
Explicaciones de Louzán
Caballero pone así el foco en el actual presidente de la RFEF, Rafael Louzán, exigiendo que ofrezca explicaciones al respecto. «Le dan una lista con 11 ciudades y luego otra con una ciudad distinta, una cambiada, y no dice nada», espetó, dejando sin valor los argumentos esgrimidos para la «expulsión» de Vigo del listado los relativos a la falta de financiación o al tamaño del estadio y las reformas que se tendrían que acometer.
Al respecto, quiso dejar claro que la ciudad se encuentra en una posición financiera con remanentes suficientes -140 millones de euros- para «afrontar toda la reforma de Balaídos y de los campos auxiliares», en caso de haber sido necesario. «No sé si otros están en esta situación», defendió.
Es por ello por lo que volvió a exigir «tener toda la información que tiene que ver con este proceso» así como las deliberaciones que llevaron al cambio. «Queremos las actas de todas las reuniones que se hicieron y las puntuaciones de todos los apartados de todas la sedes candidatas porque no es indiferente», apuntó.
Nivel de «oscurantismo»
Pero fue más allá apuntando a que, a día de hoy, la situación «es más grave» que hace tres días -cuando saltó el escándalo con la publicación de ‘El Mundo’- pero «infinitamente más grave que hace 9 meses», cuando Caballero comenzó a reclamar toda la documentación sobre el procedimiento, por lo que tildó de «oscurantismo» todo lo que rodea a la RFEF. «Exigimos toda la información porque el oscurantismo de la Federación es insoportable. No puede haber una Federación en un país serio como España con este nivel de oscurantismo en un tema tan importante».
Con todo, critica que el Concello de Vigo sigue sin recibir «ninguna explicación» sobre el asunto insistiendo en querer conocer calificando de «sorprendente» que toda la responsabilidad recaiga en la directora ahora ya cesada, María Tato, y que su principal responsable y entonces vicepresidente de la RFEF, Rafael Louzán, siga sin hablar.
«Cada vez hay más dudas, sospechas y oscurantismo, pero también para los ciudadanos de a pie, de saber cómo es esto y cómo se calificó. Esta hablando todo el mundo menos Louzán«, dijo el regidor, quien señaló no entender el motivo: «¿A qué tiene miedo, por qué no habla? En algo de tanta relevancia tiene que salir el presidente», consideró.
Es más, lo definió como «insólito» matizando que «en ningún sitio del mundo» y «ante un escándalo de esta envergadura» su principal responsable «está callado». «Louzán tiene que dar explicaciones en este país y sepamos qué pasó en este proceso de selección», dijo.