La zona costera de Canido se está convirtiendo, cada vez más, en un entorno de lujo y ‘alto standing’ con nuevas y grandiosas promociones de apartamentos que ya bañan todo el paseo marítimo de la playa y que contrarrestan con su antigua imagen de pequeño puerto pesquero y marinero.
De hecho, esas nuevas promociones residenciales han sido también el foco de algunas críticas de los vecinos y vecinas del barrio que, en los últimos meses, veían como los plataneros que inundan el paseo sufrían una extraña enfermedad con «agujeros» en sus troncos deslizando como culpables a los nuevos moradores de estos pisos.
Pues esa tendencia de lujo y nuevas viviendas continúa en la zona ya que la Gerencia de Urbanismo dará luz verde en su próxima sesión ordinaria -que se celebrará el próximo martes 14 de enero- a la construcción de un nuevo complejo residencial en el número 137 de la carretera de Canido.
Concretamente, se levantará en dos parcelas que se sitúan enfrente del Club de Remo, entre la propia playa y la Finca Mirambell, y que cuentan con una superficie de terreno total que llega a los 3.374 metros, según la información del Catastro.
Tendrá que llevarse a cabo la demolición de una edificación ya existente para dar paso, tras las obras, a un flamante edificio que estará compuesto por cuatro plantas sobre rasante para uso residencial, con una superficie total a construir que alcanzará los 2.843,38 m², además de dos plantas de sótano para albergar 19 plazas de garaje-aparcamiento, trasteros y cuartos de instalaciones además de la ejecución de una piscina exterior descubierta.
Así, el proyecto que firma la arquitecta María Mariño de Oya y que está visado con fecha 20 de septiembre del pasado año detalla que cada planta de uso residencial albergará tres unidades de viviendas mientras que la planta tercera se conformará en tipo dúplex con una escalera que dará acceso a una azotea donde se generarán tres terrazas de uso privativo.
Es más, según se revela de la distribución y superficies de cada nivel urbanizable, los apartamentos contarán con superficies que oscilarán entre los 130 y los 164 metros cuadrados, teniendo los dúplex una capacidad de unos 141 m².
Más concretamente, la planta baja cuenta con una superficie a construir de 493,08 m² mientras que la primera y segunda se reducen a 391,58 metros cuadrados llegando la tercera-azotea a tener un volumen global de 424,68 m² para sumar así los 2.843,38 m² de superficie total a construir.
En definitiva, un total de 12 viviendas en un nuevo complejo residencial a pie de playa en Canido, siendo tres de ellas tipo dúplex -en la última planta- y con sendas terrazas privadas que, probablemente, ofrecerán buenas vistas del arenal y de la costa viguesa.
A mayores, una piscina exterior descubierta y dos plantas de sótano bajo rasante destinadas a garaje y con superficies de 603,70 m² y 538,76 metros cuadrados.
Y todo ello, con un presupuesto en proyecto que supera los 1,2 millones de euros para levantar el nuevo edificio en la franja costera de Canido.
Urbanizaciones de ‘alto standing’ en la costa
Esta zona de playa y costa de Vigo se está convirtiendo así en un nuevo barrio donde muchos promotores ponen el foco para levantar nuevas urbanizaciones que están llamadas a ser de ‘alto standing’ por las características que reúnen y por el tipo de perfil de compradores que se deciden a hacerse con una.
El inmueble que se levantó en el solar del prestigioso restaurante Cíes fue uno de ellos pero, sin ir más lejos, el pasado mes de septiembre, se daba también un paso más para poner en marcha el proyecto Residencial Praia do Vao, con la presentación de la propuesta y la búsqueda de cooperativistas en otro complejo que se levantará, también, muy cerca de donde se proyecta el que este martes obtendrá el visto bueno de Urbanismo.
Concretamente, en la carretera de Baixada ao Vao -concretamente en el PERI UA-1 Ceán- y a tan solo 400 metros de la playa, sus promotores pretenden levantar ya este mismo año -para hacer entrega de las viviendas en el 2026- un nuevo desarrollo urbanístico «de alta gama» que, como ellos mismos definieron, está llamado a «redefinir el concepto de lujo» en Galicia.
La «tranquilidad, exclusividad, confort y un diseño contemporáneo» con el fin de residir en un entorno «seguro, privilegiado y libre de la polución» del centro de la ciudad son los motivos que esgrimen para que este tipo de urbanizaciones funcionen y sean objeto de interés para familias con hijos pero también para personas que buscan ya un retiro de jubilación.