Las interrupciones en el pleno ordinario de febrero son otra vez la tónica predominante. Entre el público, partidarios y detractores de la gestión del alcalde, Abel Caballero, al frente del gobierno local, lo que ha provocado enfrentamientos.
Al tomar la palabra Carmela Silva, parte de los presentes han comenzado a gritar «Vigo sí, Vigo sí», mientras que otros muchos hacían los coros «Vigo sí… tiene corrupción». Al escuchar las acusaciones, la edil socialista ha amenazado con una denuncia.
Durante la sesión se ha aprobado una modificación presupuestaria para amortizar diez millones de euros de deuda. PSOE y PP han votado a favor, mientras que el BNG lo ha hecho en contra.