Los conductores no tienen permitido abrir las puertas y dejar que suba o baje gente si no se trata de un punto habilitado, pero esa norma dejará de aplicarse por las noches. La iniciativa, que se mantendrá vigente todos los días del año, afecta a las tres líneas nocturnas y al resto entre las 22.30 horas y la finalización del servicio.
Para que esto pueda suceder, quien así lo requiera deberá avisar al conductor del Vitrasa al subirse al autobús y permanecer en la parte delantera del vehículo para luego salir por la puerta de acceso.
Localidades como Terrassa y Bilbao han aprobado recientemente establecer estas paradas a demanda -que han sido bautizadas como ‘antiacoso’- como ya ocurre en Nantes y está a punto de hacer París.
El alcalde, Abel Caballero, ha defendido la puesta en marcha de estas paradas y este aseguró que la aceptación popular ha sido mayoritaria.