Este martes 4 de febrero supone un antes y un después en la historia reciente de Vigo. Por la mañana ha quedado prohibido el tráfico para vehículos privados en la Porta do Sol. Pasar con el coche por esta céntrica zona de la ciudad ha pasado a ser ya un mero recuerdo. Durante el próximo mes sólo podrán circular por aquí los autobuses y los taxis. Y pasado ese tiempo, ni siquiera ellos.
Después de dos semanas de preparativos y de que comenzarán las primeras excavaciones junto al Sireno, el grueso de las obras de humanización para crear una nueva gran plaza no puede esperar más. De momento, sólo se introducirá este corte parcial de tráfico, de unos 300 metros, en la calle Elduayen.
Aunque la teoría dice que el acceso será exclusivo para los Vitrasa y los taxis, el Concello de Vigo permitirá la entrada a los residentes y los vehículos que tengan que ejercer labores de carga y descarga, aunque bajo expresa autorización de la Policía Local, que vigila la entrada a la zona desde el Paseo de Alfonso y Policarpo Sanz. De hecho, esta mañana ya se podía ver sólo a vehículos autorizados en la zona y a los peatones cruzar la calzada con más libertad de la habitual.
Desde el departamento de movilidad han diseñado un plan para que los autobuses de transporte urbano puedan seguir circulando con un paso alternativo mediante circuito semafórico. Pero los vehículos privados tendrán ya limitado el paso. “É un corte de 300 metros e, como resultaba inviable establecer un bloqueo con semáforos para o paso alternativo de vehículos, optouse por favorecer o transporte público e facilitar o tránsito do autobús urbano”, argumenta el Concello.
Añade el Ayuntamiento que los desvíos se establecen por las siguientes calles:
– Tráfico procedente de García Barbón-Policarpo Sanz, a través de Velázquez Moreno. Tráfico procedente de Falperra y Pi y Margall, a través de Falperra – Cachamuíña o Pi y Margall.
– Llorente: Mientras dure el cierre no se autorizan accesos al Casco Vello desde Elduayen ni salida por Sombrereiros a Elduayen.
– El acceso al Casco Vello será por Gamboa y los residentes podrán acceder también por la rúa Real hasta Travesía Esperanza.
– La salida de vehículos ligeros será por Méndez Núñez, Caracol, San Vicente, Perigos y Poboadores.
– Desde Reconquista, solo se podrá girar a la izquierda hacia Colón.
Con esta nueva medida, la situación del tráfico en el centro de la ciudad se complica todavía más. Los problemas generados por las obras de las rampas mecánicas en la Gran Vía se han visto agravados en las últimas fechas por la humanización de la calle Ronda de Don Bosco y las restricciones en la zona de Progreso. Además, en marzo comenzarán las labores de construcción del nuevo túnel de entrada a la AP9.