La Policía Local y los bomberos de Vigo han completado este miércoles el desalojo definitivo de las 46 personas que vivían en los números 11 y 13 de la calle Fisterra, en dos edificios considerados inseguros por sus pésimas condiciones de habitabilidad y salubridad, además de por el mal estado de su instalación eléctrica. En uno de ellos se ha encontrado el cadáver de un hombre de 56 años.
El Concello de Vigo ha ejecutado así la orden de desahucio que había emitido el mes pasado pero que no se había podido completar al cien por cien debido a la negativa de algunos residentes a marcharse. Ahora, sin embargo, el Ayuntamiento ha actuado con una orden judicial en mano. Acto seguido, se ha procedido a la desinfectación y desratización de los inmuebles para luego clausurarlos.
La concejala de Benestar Social, Yolanda Aguiar, ha informado de que se ha ofrecido un “alojamiento alternativo” a las 46 personas que vivían en estos edificios y ha destacado el trabajo “coordinado” que su departamento ha efectuado junto a las áreas de Urbanismo y Seguridade en las últimas fechas, desde que se obtuvo ese mandato judicial.
Estas gestiones han pasado por “entrevistarse” con los inquilinos para “detectar sus necesidades” y cubrirlas en la medida de lo posible. Así, la administración municipal ha contratado servicios de mudanza, consigna y depósito para las pertenencias de cada residente. También se les ha proporcionado un “transporte” para acudir a las alternativas habitacionales provistas por el Concello y un servicio de custodia de animales domésticos.
Un total de 28 personas han sido derivadas a establecimientos hoteleros. Otras siete ya han encontrado, de la mano de los servicios sociales, una “solución residencial alternativa con financiación del Ayuntamiento” para hacer frente a fianzas, avales y primeras mensualidades. Tres personas serán trasladadas a “recursos municipales” como pisos básicos y pisos de transición a la vida autónoma. Por último, ocho no han manifestado tener “ninguna necesidad de asistencia”.
En todo caso, Aguiar ha remarcado que “el trabajo social no acaba aquí, obviamente”. Así, su concejalía seguirá buscando “soluciones habitacionales definitivas” a quienes no las tengan.
Hallazgo de un cadáver
Este desalojo definitivo se produce horas después de que fuera encontrado el cadáver de un varón de 56 años en el número 13 de la calle Fisterra. Según han informado fuentes policiales, otro morador del inmueble avisó a la Policía Local del hallazgo a primera hora de la mañana de este miércoles. Varios efectivos de este cuerpo municipal acudieron al lugar y comprobaron que el cuerpo no presentaba signos de violencia.
Por ahora se desconocen las causas del fallecimiento, aunque vecinos han asegurado a los medios de comunicación que el hombre llevaba semanas enfermo y “con mala cara”. Sin embargo, no quiso asistir a un centro de salud. Además, han explicado que era diabético. Se sospecha que el cadáver llevaba varios días en el interior del edificio.
Los servicios fúnebres de Vigo Memorial han acudido al lugar y han retirado el cadáver poco después de su localización y antes de que se completara el vaciado de las viviendas.
Los residentes en estos pisos han lamentado la situación “invivible” que sufrían en el interior, donde tenían que lidiar con ratas, cucarachas o chinches. Por ello, han criticado al alcalde de Vigo, Abel Caballero, a quien han acusado de no tomar cartas en el asunto y de establecer medidas “a corto plazo”, ya que por ahora, les han propuesto trasladarse a varios hoteles u hostales de la ciudad “unos 20 días” mientras no encuentran otro piso donde vivir.
“Para las luces está, pero para esto no está. ¿Por qué no da la cara? Aquí hay muchas familias y estamos en la calle”, han criticado.