El alcalde de Vigo, Abel Caballero, desveló este sábado su plan para que las playas de Samil y O Vao pueden recibir este verano a los bañistas. En una rueda de prensa con gran expectación, el regidor vigués anunció que los dos arenales más grandes de la ciudad será divididas con cintas de colores para reservar espacios a un máximo de 8 personas, en el caso de que sean familiares, o 6 personas, si no conviven juntas.
De esta forma, el sistema que utilizará el Concello de Vigo a partir del 15 de junio serán unas cintas de color rojo que marcarán un recinto de aproximadamente 64 metros cuadrados. Tras desenrollarse desde bobinas fijas situadas bajo el paseo, las cintas marcarán en su interior la zona donde podrán acomodarse con la distancia de seguridad los usuarios.
Además, la playa también contará con marcas de color verde que delimitarán los accesos a la playa, tanto entrada como salida. En esta zona no se permitirá la estancia, ya que está reservada para el paso.
Según explicó Abel Cabalero, también habrá marcas rojas con flechas, que indican zona de movilidad entre espacios, serán unidireccionales y solamente de forma paralela al paseo.
Las marcas rojas serán para el uso de estancia en la playa, con espacios para las mencionadas 6 u 8 personas. Y, por último, las cintas naranjas serán zonas abiertas al mar para paseos y juegos
«Debe mantenerse siempre la distancia de seguridad entre personas y las playas serán limpiadas cada noche con medios mecánicos, retirando los elementos de señalización», aseguró el alcalde.
También explicó que serán retiradas las mesas y los bancos, de forma que no se podrá comer en esas zonas, y se señalizarán espacios que «ayuden como referencia para mantener las distancias de seguridad».