Para ello, los interesados deben enviar un correo electrónico a la dirección ofi.transportes@vigo.org. No obstante, los asuntos sobre los que deben pronunciarse los vigueses se ciñen a unos epígrafes que vienen determinados por el correspondiente expediente municipal. Básicamente, se trata de opinar sobre los problemas que se pueden solucionar, de regular las condiciones generales de uso del transporte de viajeros y de establecer los derechos y obligaciones de la empresa y los usuarios. Asimismo, se invita a aportar soluciones alternativas “regulatorias y no regulatorias”.
Todo ello con el objetivo de que el bus urbano desarrolle su actividad “en las debidas condiciones de igualdad, seguridad, determinando el alcance de las prestaciones en favor de los administrados, y regulando los aspectos de carácter jurídico, económico y administrativo relativos a la prestación del servicio”.
Cabe recordar que el alcalde de Vigo, Abel Caballero, ya anunció hace años que no renovaría la concesión -que expira el 8 de junio de 2020, 25 años después de que se formalizara el contrato que adjudicó el servicio a Viguesa de Transportes SA (Vitrasa)- a la actual compañía, unas intenciones que fueron confirmadas por el Gobierno local en el pleno de la Corporación Municipal de abril de 2018.
El 4 de octubre de 2018 se constituyó un comité técnico de trabajo para completar las tareas vinculadas al proceso de finalización de la concesión y para desarrollar los estudios necesarios para tramitar el nuevo expediente. Finalmente, la Junta de Gobierno Local acordó el pasado 27 de diciembre “denunciar” la prórroga de dicha concesión.