La adjudicación del proyecto ya está cerrada y las obras comenzarán este mes de diciembre. En la primera fase de los trabajos los esfuerzos se centrarán en la grada de Río, zona en la que se encuentran las mayores deficiencias. La actuación se llevará a cabo por partes, comenzando por el refuerzo de los contrafuertes de la estructura.
La limpieza y el saneamiento de la armadura que está a la vista se completará con una reparación en la que se utilizará morteros de alta resistencia y se aplicará un tratamiento de protección en una superficie total de 4.500 metros cuadrados. El coste ascenderá a 250.000 euros y dejará paso a una de las labores más delicadas: la sustitución de la cubierta. Estas cantidades corresponden solo a los costes de la ejecución material, por lo tanto para el calculo real del coste es necesario incrementar en un 40%, ya que se debe aplicar el 13% de gastos generales el 6% de beneficio industrial y el 21 % deIVA.
La renovación completa de la techumbre, muy deteriorada, implica la retirada de las chapas dañadas y la instalación de piezas de policarbonato transparente. «Darán mucha luminosidad a la grada sin deslumbrar, ya que disponen de filtros que evitan la entrada de rayos directos sobre los espectadores», explican desde Praza do Rei. En este caso, la actuación abarca un total de 11.500 metros cuadrados y tiene una inversión de 450.000 euros.
Mejoras de seguridad
Las mejoras de seguridad, por su parte, supondrán otro desembolso de 300.000 euros y se extenderán a toda la grada. «Buscamos mejorar los recorridos de evacuación», aclaran desde el Concello conscientes de que suelen producirse tapones en las salidas del estadio. Juntas, bajantes de agua, elementos prefabricados de hormigón y barandillas dañadas se renovarán, además de mejorar la señales de evacuación, colocar puertas con barras antipánico y suelos antideslizantes.
Una cuarta fase de los trabajos en Río se centrarán en la renovación del cerramiento de la fachada de la grada hacia la avenida de Citroën. Actualmente, existen graves deficiencias de estanqueidad que provocan goteras en los pasillos y daños en la estructura y las instalaciones deportivas que se ubican en la planta baja. Para solucionarlo, se instalará una nueva fachada en la parte exterior de los contrafuertes como si se tratase de un «manto de protección». El material elegido serán placas de policarbonato y aceros que permitirán mejorar notablemente la estética y ofrecerán la posibilidad de poder trabajar con diferentes iluminaciones. La superficie a cubrir es de 9.000 metros cuadrados y el importe llega a los 600.000 euros.
Por último, el proyecto hace especial hincapié en la renovación de los interiores de la grada, especialmente en los accesos y los baños, cuyo estado en estos momentos es deplorable. «Todas las entradas se renovarán con pavimentos antideslizantes», explican fuentes municipales. Otro aspecto a mejorar es la iluminación, con los parámetros de eficiencia energética que ya se manejan en otras actuaciones del Concello. Paredes, puertas y piezas sanitarias serán también sustituidas con un presupuesto total de 200.000 euros.