El Diario Oficial de Galicia (DOG) ha publicado este miércoles el anuncio de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental, Sustentabilidade e Cambio Climático por el que se hace pública la declaración ambiental estratégica correspondiente al procedimiento de evaluación ambiental estratégica ordinaria de la revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) del Ayuntamiento de Vigo.
Todo ello después de que el pasado 31 de agosto el Consello da Xunta diese luz verde al expediente, que supone el “último trámite necesario” para que el consistorio pueda aprobar provisionalmente el documento, según dijo el propio presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda.
Así, la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda considera “ambientalmente viable” el PXOM vigués, siempre y cuando en el documento final se cumplan una serie de condiciones de carácter ambiental establecidas por los distintos órganos sectoriales en los informes emitidos.
En concreto, entre los aspectos que se deberán “corregir o completar” el Ayuntamiento de Vigo deberá actualizar una serie de planos con la información de los mapas de ruidos e incluir nuevos mapas de los indicadores sonoros.
La Consellería también pide al gobierno municipal que especifique algunos aspectos técnicos y que corrija ciertas referencias a legislaciones que ya han sido publicadas en la actualidad, entre otras cuestiones.
Aprobación provisional
Precisamente este pasado martes el gobierno municipal de Vigo fijó “en tres meses” el plazo de aprobación provisional del nuevo PGOM, justo una semana después de que el alcalde, Abel Caballero, hubiera anunciado que el documento tendría el visto bueno “en dos meses”.
Además, la concejal de Urbanismo, María José Caride, justificó el mantenimiento del Instrumento de Ordenación Provisional (IOP) “para dar certidumbre” a la situación urbanística de la ciudad.
Caride trasladó estas consideraciones tras conocerse que el secretario municipal, en un informe realizado precisamente a instancias de la concejal, advertía de que se van a dar problemas de “ordenación discordante” a partir de mediados de octubre, ya que se acaba el plazo de suspensión de licencias.
En ese momento, si se amplía el plazo de aprobación provisional (algo viable legalmente) y se mantiene el IOP, las licencias que se otorguen a partir de entonces se basarán en una ordenación urbanística que “no coincidirá, por lo general, con la inicialmente aprobada (en agosto de 2021) en el PXOM en revisión” y “quizá tampoco con la que provisionalmente se apruebe” en tres meses.
El secretario advierte de que se trata de una “situación anómala” y que el pleno, “considerando el interés público en juego y los fines del PXOM en revisión”, debe valorar “a fin de considerar la conveniencia de dejar, o no, sin efecto el IOP”.
En todo caso, también apunta que, si no se mantiene la ordenación provisional, la situación urbanística se retrotraerá al planeamiento de 1993 (el anterior en vigor, dado que el de 2008 fue anulado por el Tribunal Supremo), por tanto, también se producirá una “discordancia”. Sin embargo, el secretario estima en su informe que la incidencia de esa ordenación discordante “puede tener consecuencias más leves que la discordancia del IOP”.
María José Caride, no obstante, aseguró que mantener la vigencia de la ordenación provisional permitirá “dar certidumbre” a la situación urbanística de Vigo, y “estabilidad” a los proyectos que se han puesto en marcha al amparo de esa normativa. Asimismo, indicó que “promotores y ciudadanos” pedían mantener ese IOP.