El futuro laboratorio cuántico (Center for Quantum Communications Technology, QCTech), que situará a Vigo en el mapa europeo de esta tecnología, se instalará en un edificio de la calle López Mora, propiedad de la Zona Franca. Se trata del edificio blanco situado en una de las esquinas de las instalaciones que el Consorcio adquirió hace algunos meses a Abanca.
El delegado del Estado, David Regades; el alcalde de Vigo, Abel Caballero; y la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, visitaron las instalaciones, acompañados por el rector de la Universidad de Vigo, Manuel Reigosa, y el profesor de la Universidad de Vigo, Francisco Díaz, promotor del proyecto junto con la Zona Franca.
Zona Franca es socio fundador del Center for Quantum Communications Technology (QCTech), que se constituirá en los próximos meses en una asociación.
Se trata de una iniciativa de la Universidad de Vigo impulsada por la Agencia Espacial Europea (ESA) y el grupo de trabajo incluye a profesores e investigadores de Ingeniería de Telecomunicación con experiencia en comunicaciones y criptografía cuánticas, con más de 20 años de recorrido investigador, con reconocimiento internacional como expertos y referentes en el diseño y análisis de seguridad de estos sistemas. Pero también en fotónica integrada y espacio con la participaión en proyectos de I+D con la Agencia Especial Europea durante más de 20 años y participación en diversos proyectos del Programa Marco europeo en tecnologías de comunicación espacial.
El centro de investigación pretende ser un referente a nivel internacional en el ámbito de las comunicaciones cuánticas, tanto en infraestructuras terrenas como en espacio, con el objetivo de descubrir y desarrollar nuevas y poderosas aplicaciones de estas tecnologías que ayudarán a impulsar las economías futuras. Ayudará a fijar talento en un ámbito en el que Europa y España deben posicionarse para competir con unos mercados previstos de miles de millones de euros. Con este centro el proceso de transferencia a la industria española se verá acelerado incluyendo la creación de nuevas iniciativas empresariales, como polo tractor de empresas de alto valor añadido y mediante la creación de spin-off.
El centro de investigación, en su calidad de generador de conocimiento debe, por un lado, mantener un contacto estrecho con los grupos de investigación más afines a las tecnologías cuánticas y, por otro, priorizar la realización de proyectos para las empresas que permitan a éstas dar un salto competitivo en el mercado, preferentemente internacional, las Universidades se beneficiarán de la presencia de un nuevo agente con capacidad de traccionar proyectos de envergadura y las empresas tendrían un interlocutor con una gran agilidad.
Entre las potencialidades está la producción de artículos científicos y resultados de investigaciones, el liderazgo de proyectos competitivos a nivel internacional y europeo, la formación de técnicos e investigadores a través de un grado, máster y programa de doctorado de excelencia que dará respuesta a la creciente demanda de expertos en estas tecnologías, además de proveer de servicios a empresas e industrias.
El proyecto cuenta con importantes apoyos como el EPIC (European Photonics Industry Consortium), el Consorcio Europeo que agrupa a más de 650 empresas europeas del sector de la fotónica; también grandes compañías nacionales e internacionales de distintos sectores como telecomunicaciones, aeroespacial o defensa, que han pedido confidencialidad; el Instituto de Astrofísica de Canarias, la Diputación de Pontevedra y el Concello de Vigo.