Por segunda jornada consecutiva, la ciudad de Vigo ha amanecido bajo un manto de humo que no solo ha cambiado el color de la luna, el sol e incluso el del propio cielo, donde el azul ha dado paso a tonos amarillos. El humo procedente de los terribles incendios de Portugal también ha provocado que «desaparezca» la línea del horizonte de Vigo, además de afectar de forma notable la calidad del aire, en el que hay una importante presencia de partículas en suspensión que pueden tener efectos en la salud al quedar retenidas en la mucosa o los ojos.
A primera hora de la mañana, en plena bajada del nivel del mar hacia la primera marea muerta del día (hoy el nivel se quedará a apenas 0,2 metros), el mar se fundía completamente con el cielo de Vigo, al que estos días está llegando –y a buena parte del Atlántico– humo que abarca una superficie de 100.000 kilómetros cuadrados procedente de los graves fuegos que asolan Portugal, donde se ha declarado el estado de calamidad. Los incendios al norte del país ya se han cobrado siete vidas y se trabaja sin descanso para intentar sofocar las llamas que ya han arrasado más de 10.000 hectáreas.
Ese humo procedente de Portugal ha vuelto a teñir el sol, aunque con un tono menos intenso que en la jornada del miércoles por la presencia también de nubes en el cielo. También la luna llena ha sido rojiza buena parte de la noche.
Los usuarios de las redes sociales, además de dejar constancia con sus fotografías del cambio en el color de los astros y del cielo, han coincidido en señalar que la «atmósfera» que envuelve estos días la ciudad parece sacada de una película de ciencia ficción y han citado ejemplos como Mad Max. «Parece que Vigo tiene el filtro naranja q ponían en las películas d los 2000 cuando iban a África!», señalaba en X una internauta (@_earlysunsets__). Por su parte, @FranTrabada tiraba de ironía para remarcar que «Está el cielo hoy en Vigo como si aún entrenase al Celta Benítez. Que parece que en cualquier momento te va a salir un zombie de una esquina».
Además del color, también se percibe en la ciudad el olor a humo, a pesar de que los incendios se encuentran a más de 100 kilómetros de la ciudad. Así, la calidad del aire ha descendido por los niveles elevados de partículas (PM) en las Rías Baixas –y en el oeste de la provincia de A Coruña–. Según ha indicado Meteogalicia, hay cinco estaciones en las que se detecta una peor calidad del aire y cuatro de ellas están en Vigo, con presencia muy elevada de partículas en suspensión, a niveles de entre 50 y 70 µg/m3.
Este tipo de partículas quedan retenidas en la mucosa que recubre las vías respiratorias superiores y también provocan picor de ojos.
Mientras tanto, en Galicia, también se han declarado varios focos de incendios en las últimas horas, entre ellos uno en Aguasantas, en Cotobade, que ya ha sido extinguido y que arrasó 13,88 hectáreas de monte raso, en su mayoría. El miércoles también se declaraba a última hora otro incendio en la provincia de Pontevedra, en la parroquia de Oitavén, en Fornelos de Montes.