La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado para este martes una alerta amarilla en las Rías Baixas, en el Miño de Pontevedra y en el sur de Lugo por temperaturas máximas de 34 grados. Además, el aviso será naranja en el sur de la provincia de Ourense, así como en la zona del Miño, por temperaturas de hasta 39 grados. En concreto, la alerta se extenderá desde las 13:00 horas hasta las 20:00 horas de este martes.
En toda España hay activas alertas por calor en 14 provincias con máximas que, en algunos casos, rebasarán los 40º grados, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología.
En Galicia, ya se ha decretado este lunes alerta amarilla por máximas de hasta 34 grados en la zona del Miño de Ourense y en Vigo se alcanzaron los 29,3 grados, con cielos poco nubosos y despejados que se mantendrán en los próximos días y que han animado a miles de personas a disfrutar del bueno tiempo en las playas.
Según el pronóstico, el buen tiempo se mantendrá, como mínimo, hasta el viernes, jornada en la que se prevé la entrada de nubes a última hora del día, aunque la probabilidad de precipitaciones para el fin de semana es, por ahora, baja.
En cuanto a las temperaturas, según la agencia gallega Meteogalicia, las mínimas serán normales y altas para las máximas respecto a lo esperado para este periodo, con valores que en general se mantendrán sin cambios a pesar de que oscilarán.
Principales consejos ante la ola de calor
A través de un comunicado, la Xunta ha reiterado los principales consejos que se deben seguir ante la subida de temperaturas previstas para esta semana en toda Galicia, recomendaciones que se centran, fundamentalmente, en la alimentación y la exposición al sol.
Así, se recomienda beber más líquido del habitual sin esperar a tener sed, sobre todo agua y zumos de fruta ligeramente fríos. Al respecto de las bebidas alcohólicas, deben evitarse al igual que las bebidas calientes, café, té y bebidas muy azucaradas. Del mismo modo, se debe priorizar comer verduras y frutas y evitar las comidas copiosas.
Al respecto de la vestimenta, se recomienda tejidos naturales, ligeros y holgados, de colores claras, sombreros, gafas de sol y cremas protectoras solares. El calzado debe ser cómodo, fresco y que transpire.
En el interior de los edificios se permanecerá, a ser posible, en espacios ventilados o acondicionados, utilizando las habitaciones más frescas de la vivienda. Durante el día, se aconseja bajar las persianas y cerrar las ventanas, abriéndolas por la noche para ventilar. Asimismo, podrán utilizarse ventiladores. En los momentos de calor más intenso se puede refrescar el cuerpo con una ducha o con un baño en agua tibio. Además, se procurará eludir las aglomeraciones de personas en locales sin aire acondicionado.
En el exterior de los edificios se deben evitar, en la medida de lo posible, las actividades en las horas más calurosas, reducir la actividad física, procurar buscar las sombras y, cuando se estacione el coche, no se deberá dejar en el interior ni a niños o niñas ni a personas mayores ni a ningún animal de compaña.
Asimismo, conviene no ir a la playa en las horas de máximo calor, en el mediodía y en las primeras de la tarde. Además, la Consellería de Sanidad ha recordado que nunca se debe quedar dormido tomando el sol.
Respecto a las cremas de protección, se deben utilizar las de mayor protección posible y nunca inferior a factor 15.
Se recuerda también que, en el caso de tener parientes o vecinos que vivan sos, es conveniente hacerles un seguimiento especial estos días, con el fin de comprobar que toman las medidas recomendadas y su estado de salud es el habitual.
La exposición a temperaturas excesivas puede provocar problemas de salud como mareo, cansancio, debilidad, fatiga y calambres musculares, síncope, deshidratación, insolación y golpe de calor.
La mayoría de las enfermedades asociadas al calor son consecuencia más o menos grave de un fallo en el sistema de termorregulación.