El Concello de Vigo acaba de dejar en suspensión el contrato que formalizó el pasado 5 de abril de 2024 y que adjudicó a la empresa Iturri SA para suministrar al parque central de Teis del servicio de Bomberos de Vigo de una superestructura de salvamento en altura que llegaría a los 64 metros tras colocarla sobre un chasis Iveco.
El acuerdo pasó por la junta de gobierno local el pasado 17 de enero y el motivo que se esgrime para dejar sin efecto esta contratación, que tiene un valor de 1,35 millones de euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de 10 meses desde el día siguiente a su formalización -es decir, hasta el 6 de febrero de este año-, son los «problemas que están surgiendo en el ámbito global de la industria de la automoción», reza el documento.
De hecho, esos problemas los achacan a la «demora en los plazos de entrega de los componentes electrónicos«, es decir, paneles, sensores y módulos de conexiones que, como se detalla, «forman parte e integran la superestructura de salvamento en altura que se está elaborando para este Ayuntamiento de Vigo», especifican los técnicos municipales.
Es por ello por lo que el pasado 2 de enero, la empresa adjudicataria del contrato remite una solicitud al concello pidiendo dicha suspensión del contrato así como la ampliación del mismo por un periodo de seis meses, hasta el 20 de junio de 2025, debido a las «dificultades para entregar el vehículo», dejando constancia además de un informe elaborado por el gerente de ventas de Vema Lift, proveedor global de sistemas de vehículos de alta calidad de extinción de incendios.
El objetivo de este contrato -cuya licitación avanzó VIGOÉ- y la entrega de esta escalera que llegaría a alcanzar los 64 metros de altura es sustituir la existente de 55 metros destinada a trabajos de extinción de incendios y trabajos en altura del parque central de Teis «por mostrar deficiencias en las características técnicas y de operatividad con más de 15 años», justifican.
Sin embargo, desde el sindicato CUT de Bomberos -que no tenían conocimiento de esta suspensión del contrato- ya advirtieron en su momento que este tipo de estructura no era la más adecuada para el servicio en la ciudad. Y este viernes así lo han vuelto a manifestar, recordando que el «ingente gasto de dinero público» que se hacía en esta contratación «no tenía ningún sentido», poniendo el foco en tener que colocar una superestructura de este tipo sobre un vehículo con «casi 20 años de antigüedad».
Es más, ponen como ejemplos los parques de Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia, donde este tipo de vehículos en altura «se compran nuevos y por el mismo precio», explicó David Álvarez. «Tener una superestructura de un millón de euros encima de un camión de más de 20 años conlleva, dentro de unos 15, que esté prácticamente obsoleto», señaló.
Pero además de ello también lo consideró por la falta de funcionalidad que este tipo de vehículos tiene para una ciudad como Vigo ya que el uso de este tipo de escaleras tan altas se hace de forma «fortuita». Y es que como relató se trata de infraestructuras que tienen «unas horas de uso reales» ya que las operaciones en las que se utilizan llegan a ser casi «ridículas» debido a que «prácticamente no puede operar en ninguna» de las calles de la ciudad por la orografía pero también porque son vehículos que están destinados a usos en zonas industriales, «con terrenos muy planos en los que se trabaja bien con poco viento», explicó.
«Es decir, todo lo contrario a lo que necesita nuestra ciudad en este momento», subrayó. «Desde un principio estuvimos totalmente en contra de esta compra porque creíamos que era un dinero tirado, que no tenía ningún sentido porque, realmente, un vehículo completo nuevo tiene el mismo precio», dijo.
Además, recordó que la anterior escalera en altura que se adquirió en el año 2008 «ya se denunció en su momento que era inservible y no apta para nuestro servicio. Pero se compró igual», recordó, matizando que, al final, «el tiempo nos dio la razón». De este modo, se mostró optimista ante este cambio en una «larga trayectoria de auténticas locuras» por parte de los encargados de realizar la adquisición y la toma de decisiones a la hora de comprar los vehículos para el servicio.
De hecho, en la propia resolución de la junta de gobierno donde se da luz verde a la suspensión del contrato -que finalmente se aprobó hasta el 20 de junio de este año-, se reconoce que el servicio de bomberos, como propia logística, tiene en su flota un total de tres vehículos de salvamento en altura, dos con una capacidad de trabajo de 39 metros y otra de 18 metros que, «en el caso de ausencia del vehículo a sustituir, prestaría dentro de sus posibilidades el servicio ante tanto no pudiera ser montada la nueva superestructura, no generando problema alguno en el caso de intervención».
Seis nuevos vehículos para ser ‘top’
Y a mayores, este mismo viernes, el alcalde Abel Caballero sí informó que la sesión ordinaria de la junta de gobierno celebrada en el día de hoy aprobó la compra de seis nuevos vehículos para el servicio municipal de Bomberos por casi un millón de euros para los parques de Teis y Coruxo.
Y lo hizo a través de un audio enviado a los medios de comunicación, donde explicó que se trata de dos autobombas, dos vehículos todoterrenos 4×4, un furgón de nueve plazas para el traslado de los efectivos a las intervenciones de gran complejidad y larga duración así como un coche de la jefatura. En total, 965.000 euros para renovar la flota del servicio.
«Esto significa que este año los dos parques de bomberos de Vigo tendrán nuevos vehículos y seguirán dotados con un material y unas capacidades de actuación que son ‘top’ que se pueden tener en este momento en ningún parque de bomberos del mundo», se vanaglorió.
En este sentido, David Álvarez consideró positiva la compra de estos nuevos vehículos por los que llevan esperando demasiado tiempo. «Bienvenidos sean ya que llevamos denunciando que tenemos vehículos obsoletos y que no cumplen con las normas de seguridad», señaló, matizando que alguno de ellos, exactamente una nodriza de gran tamaño «no tenía ni título de seguridad para sus ocupantes», detalló.
«Bienvenida sea siempre que quitemos camiones obsoletos. Es bueno tanto para nuestra seguridad como para la ciudad y para los ciudadanos», valoró. Con todo, puso el foco en el hecho de que este tipo de adquisiciones se hacen a través de dinero «que aportan las aseguradoras a través de un impuesto que se cobra», explicó. «No es dinero que utilice el Concello de Vigo, ya lo denunciamos en numerosas ocasiones y se está haciendo un uso fraudulento. Que no se saquen flores porque el dinero entra directamente de los impuestos de las aseguradoras y es un dinero finalista para bomberos que sí o sí se tiene que gastar y hasta ahora no se hizo», manifestó.