La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha aceptado este lunes la dimisión de la secretaria de Estado de Transportes y anterior presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, por el caso de los trenes que no cabían en los túneles de la red de Cercanías de Asturias y Cantabria. Junto a ella, ha renunciado a su cargo el presidente de Renfe, Isaías Táboas, según han confirmado a Europa Press fuentes próximas al Ministerio.
Ambos han pagado con sus puestos el escándalo conocido este mes de febrero, cuando se constató que una treintena de trenes superaban las dimensiones necesarias para acceder a pasos subterráneos situados en el norte de España. Estas salidas se suman a las de otros dos responsables, el titular de la jefatura de Inspección y Tecnología de vía de Adif y el gerente de los trenes de Cantabria, perteneciente a Renfe.
De esta forma, Vigo pierde a una valedora de su tren de alta velocidad. Isabel Pardo de Vera recibió en 2022 la Medalla de Oro de la ciudad. Se la concedió Abel Caballero para, según defendió, reconocerle la apuesta por la variante de Cerdedo y la salida sur. Además, de este modo se le comprometía implícitamente de cara al futuro, para impulsar los proyectos relacionados con la urbe olívica.
Ella misma valoró la distinción como “un recordatorio de las cosas que tenemos que hacer, la brújula que nos seguirá señalando hacia el noroeste y un recordatorio constante de mi compromiso con la prosperidad de mi tierra y de esta ciudad que ya considero mía”.
La ministra Raquel Sánchez, que en su día anunció la apertura de una auditoría, ha trasladado a Pardo de Vera y a Táboas su “reconocimiento y agradecimiento” por el trabajo desempeñado en sus respectivos cargos, según recoge la Cadena SER.