La fiesta de la Brincadeira ya calienta motores en Bouzas. La tradicional celebración de la expulsión de los franceses de la villa ha confirmado sus fechas para este año, ya tiene encarrilado su programa y la próxima semana abrirá el plazo de inscripción para instalar los puestos de comida, artesanía y demás artículos. Para evitar los aplazamientos de las últimas ediciones por culpa de la lluvia, la organización ha decidido trasladar los festejos directamente a mayo, para aumentar así las posibilidades de contar con buen tiempo.
Además, para no coincidir con una jornada de reuniones familiares como el Día de la Madre, se ha establecido como referencia el segundo fin de semana de ese mes. Esta fecha queda ya como definitiva de cara al futuro. Así, los días 9 y 10 de mayo de 2020 todo Vigo ocupará Bouzas para festejar la victoria sobre el enemigo invasor, que la propia ciudad olívica ya habrá completado a finales de marzo.
Pero esta no es la única novedad. En el propio planteamiento de fechas se halla otra. La Brincadeira ya no sólo se desarrollará a lo largo del domingo, sino que por primera vez se ampliará al sábado. De esta manera, habrá dos días para acercarse hasta el barrio para disfrutar de su habitual ambiente de celebración.
Hay todavía más. Tal y como avanzó VIGOÉ el año pasado, la fiesta tomará una dimensión mayor al organizar su propia representación histórica, emulando así a la Reconquista. Tal y como viene haciendo desde hace décadas la Asociación Veciñal do Casco Vello, sus homólogos de Bouzas estrenarán una escenificación en la que liberarán a la villa del yugo galo, recreando lo sucedido el 31 de marzo de 1809. Esta nueva representación tendrá lugar el domingo, aunque no será la única, ya que se montará otro espectáculo previo el sábado por la tarde.
Reconocimiento autonómico
Con todos estos ingredientes, la Brincadeira crece en espectacularidad, contenido y duración. Además, se asienta en el calendario buscando una fecha fija y mejores condiciones meteorológicas. Todo ello servirá para lograr el gran objetivo que se ha marcado la organización: que la fiesta sea declarada de Interés Turístico de Galicia. El camino hacia esa meta arrancará formalmente este martes, cuando presenten en el Concello de Vigo la solicitud para obtener el respaldo municipal, paso previo imprescindible y que se da por hecho ante el habitual apoyo que da el Ayuntamiento a esta celebración.
Paralelamente, mientras se completa ese trámite se abrirá el periodo de inscripciones para los puestos. Este año se verá reducida la cifra por cuestiones de seguridad. Aproximadamente habrá una veintena menos, para quedar en unos 150 puestos. Ante este recorte, la organización dará prioridad a vecinos, artesanos, Anpas y aquellas personas que ya hayan tenido presencia en ediciones anteriores.