Este lunes el Consello de la Xunta daba luz verde al proyecto de rehabilitación del antiguo edificio de los juzgados de la calle Lalín y, este martes, el conselleiro de Presidencia, Justicia y Deportes, Diego Calvo, visitaba las instalaciones para presentar una propuesta que saldrá a licitación en los próximos días.
Acompañado del director general de Xustiza, José Tronchoni, y de la delegada territorial de la Xunta en Vigo, Ana Ortiz, explicó que el inmueble va a ser objeto de una rehabilitación integral que permitirá dotar de un centenar de espacios para la ocupación temporal por parte de asociaciones y entidades sociales de la ciudad.
De hecho, como recordó el conselleiro, se trata de «un símbolo y un ejemplo más» del compromiso del Gobierno gallego con la recuperación del patrimonio de la ciudad «para nuevos usos» como ya se hizo, especificó, con la reforma del Hospital Xeral de Vigo para acoger la Ciudad de la Justicia o como se está haciendo en la antigua Audiencia Provincial con las obras del Centro Integral de Salud ‘Olimpia Valencia’.
Además, destacó la recuperación del Teatro Cine Fraga con el objetivo de destinarlo a fines culturales, tras la firma del acuerdo de compraventa del inmueble el mes pasado junto con la Diputación Provincial de Pontevedra y Abanca.
Con todo, el Consello de la Xunta aprobó ya la licitación por 19,4 millones de euros del proyecto de rehabilitación del edificio de la calle Lalín presentado a comienzos de año por el arquitecto Alfonso Penela, ganador del concurso de ideas convocado por la Xunta la finales de 2022.
Se prevé que las obras comiencen a finales de este año y que se prolonguen un máximo de 16 meses, con lo que estará lista en el año 2026.
La financiación de la actuación se enmarca en el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder Galicia 2021-2027).
El arquitecto Penela explicó los detalles del proyecto que contempla, entre otras actuaciones, mejoras en la envolvente térmica de la fachada, en el sistema de climatización, en la iluminación, en la cubierta o en el abastecimiento.
Así, el nuevo edificio contará con una terraza de unos 400 metros cuadrados en la azotea, un auditorio de unas 400 butacas y espacios para casi 100 asociaciones.
La idea, según relató, es mantener cerca del 60-70% de las instalaciones actualmente construidas y hacer un inmueble sostenible, con prácticamente ‘consumo 0’ de energía debido a que tendrá paneles solares y otros sistemas para reducir el uso de electricidad.
También se facilitará la accesibilidad y la integración en el entorno mediante la retirada del aparcamiento exterior y la rebaja del terreno para que quede en continuidad con la planta baja.
Diego Calvo incidió en que la actuación, además de contribuir a recuperar el patrimonio para nuevos usos, supone la dinamización del asociacionismo, al igual que la Xunta ya hizo en otras instalaciones autonómicas como el edificio de la calle Benito Corbal en Pontevedra o el Espacio Amizar en A Coruña.