La plantilla de Vitrasa, concesionaria del transporte urbano de Vigo, decidió esta pasada noche convocar una huelga indefinida a partir del próximo sábado 25 de noviembre ante la “negativa” de la empresa a negociar el convenio colectivo y después de que trabajadores fuesen sancionados con 60 días de suspensión de empleo y sueldo en el marco de los paros parciales que se están desarrollando.
La decisión fue adoptada por mayoría después de la consulta realizada por el comité de empresa este jueves entre el personal de la compañía. La reunión se celebró en las propias instalaciones de Vitrasa y, según los sindicatos, “registró una alta participación”. Los resultados de las votaciones “evidenciaron la apuesta del personal por endurecer las movilizaciones”, ya que 214 personas optaron por convocar huelga indefinida, frente a las 30 que se mostraron partidarias de suspender las protestas.
Esta posibilidad de aumentar las reivindicaciones ya había sido avanzada por los sindicatos. Cabe recordar además que la plantilla de Vitrasa está llamada a otras dos jornadas de huelga para los días 8 y 9 de noviembre. Además de concentraciones frente al ayuntamiento, se ha convocado una manifestación que partirá a las 19.00 horas del próximo jueves de la Praza de España para recorrer la Gran Vía, Urzaiz, Colón y acabar en la calle Areal.
Por otro lado, la representación laboral le envió un requerimiento al Concello de Vigo para que rectifique el decreto de servicios mínimos, tras la sentencia del TSXG que insta a corregir la operativa por vulneración del derecho de huelga.
Finalmente, la plantilla insiste en que tanto la dirección de Vitrasa como el Concello de Vigo están “impidiendo” una posible solución al conflicto. La concesionaria con su “negativa” a negociar el convenio “ya que se encuentra en una posición muy cómoda con decretos de servicios mínimos hechos a medida”, y el gobierno local “culpando a unos trabajadores que únicamente defienden sus legítimos derechos”.