La Praza da Estrela de Vigo, entre As Avenidas y Areal, vivió la madrugada de este sábado otro ‘macrobotellón’ multitudinario en el que participaron cientos de jóvenes. La Policía Local de Vigo desplazó a la zona un total de seis patrullas y logró desalojar el botellón de la zona sin que se registrasen incidentes de importancia. Los hosteleros vigueses, que desde hace tiempo reclaman medidas para evitar este tipo de concentraciones, distribuyeron imágenes en las que se puede observar el lamentable estado en el que quedó la plaza.
«En tan sólo 8 minutos desalojaron a cientos de jóvenes, y muchos, incluso menores. Por eso queremos agradecer la intervención policial y que les doten de medios y adopten medidas de prevención para erradicar el botellón, algo que está prohibido en toda Galicia y gran parte de España», asegura en un comunicado la Asociación Provincial de Establecimientos Musicales y Espectáculos Reglados (Apemer). También aseguran que la semana pasada tres patrullas de la Policía ya intentaron disolver el botellón de la Praza da Estrela de Vigo sin éxito.
Denuncian incidentes
Tras condenar «rotundamente» los incidentes protagonizados por grupos de jóvenes en los últimos fines de semana, el colectivo de hosteleros y empresas de ocio nocturno solicitó «reunirse urgentemente con el Concello de Vigo para encontrar, cuanto antes, una solución a este grave problema». En su opinión, «hay que erradicar el botellón» de las calles y apostar por un «funcionamiento ordenado y normalizado de la hostelería», algo que, a su juicio, «puede y debe ser compatible con el descanso vecinal».
«Para ello -dicen en un comunicado conjunto- es necesario que se cumplan cuanto antes los horarios ordinarios de la hostelería en sus diferentes segmentos (bares, cafeterías, bares especiales y discotecas), así como sus terrazas habituales, etc. Y al respecto subrayan que «no es justo que los horarios se controlen solo a las discotecas por ser los últimos en cerrar y que otros locales tengan «barra libre».
«Grave problema»
«Venimos manifestando desde hace tiempo que el botellón no es sólo un problema cultural. Es un grave problema que venimos padeciendo desde hace tiempo y que afecta a los vecinos y su descanso y a los hosteleros y sus negocios por cuanto que generan unos problemas de convivencia que la hostelería es la primera interesada en evitar», indican.
Agregan además que «el botellón está alcanzando estas semanas cotas de vandalismo nunca vistas, con intimidaciones y agresiones » a las que suman» destrozos, quema de contenedores, forzamiento de portales, robos, etc.», actos a los que «hay que poner coto cuanto antes».
Ley anti-botellón
Advierten así que mientras no se cumpla la ley anti-botellón, como ya han hecho otras comunidades autónomas, es necesario «una mayor presencia policial para evitar los desmanes acaecidos estos últimos jueves y viernes y que sirva de protección, tanto al vecindario como a los propios hosteleros» y «reuniones inmediatas donde poder establecer protocolos de actuación entre los diferentes sectores implicados».