Según informó la institución ourensana a Vigo Última Hora, los plazos ya están abiertos, tanto para solicitar el ingreso de personas dependientes como para acceder a la bolsa de trabajo que se creará. «Tienen prioridad los vecinos del barrio y las personas dependientes», afirman desde San Rosendo antes de aclarar que «si después quedan plazas libres, podrán entrar no dependientes».
La residencia proyectada por los arquitectos Francisco Castro Nieto y Pedro Alonso Fernández tendrá una superficie total construida de 6.934 metros cuadrados, repartidos en dos sótanos, planta baja y dos alturas en los que se habilitarán un total de 74 plazas con prioridad para los vecinos de la parroquia. La población de Coia, el barrio construido entre la década de los años 60 y los 70 en pleno boom demográfico de la ciudad, está actualmente muy envejecida y precisa con urgencia de servicios geriátricos.
Según informó este sábado la Fundación San Rosendo, la institución ha creado 175 nuevas plazas para mayores dependientes en el año 2014, un crecimiento del 5,1%, y mantuvo el nivel de ocupación del año anterior, que se situó en el 97%. La Fundación cerró 2014 con 3.600 plazas, distribuidas en 40 núcleos rurales gallegos, y un equipo de 1.576 profesionales.
Residencia en A Cañiza
Al cierre del presente ejercicio, cuenta con una red de 68 centros, tras la apertura de la residencia de Muíños y otra en el ayuntamiento pontevedrés de A Cañiza. Muíños, en funcionamiento desde el mes de marzo, alcanzó ya la ocupación del 100%, mientras que A Cañiza, abierta en septiembre, supera el 40%.
El presidente de la Fundación San Rosendo, José Luis Gavela, explicó que en 2014 se consolidó «la tendencia de años anteriores» en los que «el 98% de los ingresos de nuevos residentes son personas mayores con un elevado nivel de dependencia». Según indicó, la crisis económica de las familias y las dificultades de acceso a la Lei de Dependencia, son la causa del «retraso del ingreso de mayores que lo necesitan». Además, Gavela apuntó que en 2014, las familias «se han enfrentado a un nuevo contexto administrativo» que modifica los criterios de evaluación para las ayudas a la dependencia.
La Fundación pide a la Administración que «introduzca criterios más solidarios» en la asignación de plazas concertadas, como el de «rentas más bajas», «el arraigo en residencia habitual» o «la actividad económica en el rural» para proteger a las familias gallegas con menos recursos.
Además de la residencia de Coia, en el primer semestre de 2015, la Fundación San Rosendo abrirá la de Lobeira, por lo que en conjunto, se crearán 129 nuevas plazas para dependientes y 50 nuevos empleos, cuando tengan una ocupación del 100%. En el caso de Lobeira, la rehabilitación del antiguo Grupo Escolar permitirá atender a 55 dependientes. La red de centros de la Fundación alcanzará las 70 residencias en toda Galicia.
Proyecto en Baiona
La Fundación también ha realizado los primeros contactos con el ayuntamiento de Lobios para desarrollar un nuevo proyecto de residencia en la Baixa Limia. El desarrollo de este proyecto dependerá de la evolución de la ocupación del centro de Lobeira. Además, la Fundación está valorando un nuevo proyecto asistencial en Baiona de 80 plazas.