Aunque el proyecto de Las flores de Greta lleva en marcha desde 2018, con un pequeño taller en Morgadáns y mucha venta en ferias de artesanía y online, no fue hasta el pasado 1 de abril cuando abrió su primera tienda física en pleno corazón de Vigo.
Las flores de Greta es uno de esos negocios con encanto que están insuflando vida al Casco Vello de Vigo. Situada en la Calle Abeleira Menéndez, la tienda supone para sus propietarias disponer por fin de un escaparate físico donde exponer la ropa elaborada con la técnica ‘ecoprint’ y poder responder personalmente y de forma presencial a todas las consultas de la clientela.
El ‘ecoprint’ consiste en estampar en los tejidos los pigmentos naturales de las hojas y las flores mediante una técnica artesanal y respetuosa con el medio ambiente.
El proceso del ‘ecoprint’
Las flores de Greta dispone de un taller en Morgadáns (Gondomar) donde llevan a cabo todo el proceso de elaboración de las prendas con la técnica del ‘ecoprint’.
En los montes de alrededor recolectan las hojas de eucalipto, arce, liquidambar, feixoa, castaño, carballo, nogal o acacia. “Hacemos una recogida respetuosa”, explica Uxía Benlloch, una de las tres socias del negocio. También plantas sus propias flores y muchos son los vecinos que les surten con rosas, claveles, geranios o dalias.
Uxía explica que lo primero que se hace es el mordiente del tejido. Se prepara la fibra para recibir el pigmento de las flores y las hojas, que se enrollan en el tejido y se meten en un depósito de vapor de agua caliente. Allí el tejido y los elementos naturales se irán fusionando poco a poco y al cabo de una semana, tras ese proceso que es como una fermentación, quedarán plasmados para siempre los trazos de la naturaleza en cada prenda. Nadie dibuja nada. No hay diseños más allá de una composición de hojas y flores sobre un tejido.
Las hojas y las flores se quitan con cuidado para comprobar que efectivamente han quedado las formas en la prenda y luego se rocía con fijadores naturales (a base de vinagre) para volver a cerrar las fibras. “Todas las prendas son diferentes y es como si te llevases un trocito de naturaleza a tu armario”, destaca Uxía Benlloch, que asegura que en cada proceso de estampación siempre hay un grado de experimentación. “Hay especies que marcan y otras que no. Nosotras ya sabemos cuáles son las más efectivas, pero también nos gusta ir probando las alternativas que nos da la naturaleza”, indica.
Algodón, lino, seda y lana son los tejidos orgánicos con los que confeccionan las prendas en colaboración con talleres de costura locales.
Para amigas del alma
Lo que comenzó como una aventura y una vía de escape laboral para tres jóvenes viguesas se ha consolidado tras su recorrido por las principales ferias de artesanía de España y una fuerte presencia online. “Vendemos mucho a través de la web y sobre todo en la campaña de Navidad”, asegura Uxía. “Quién nos compra busca un regalo especial para su madre, tía abuela o amigas del alma”, destaca.
La buena acogida de la propuesta animó a las emprendedoras a impartir talleres de ‘ecoprint’, algo que están preparando para septiembre. “Es algo que nos llevan pidiendo desde hace tiempo”, explica Uxía.
Junto con Uxía, que es diseñadora gráfica de formación, conforman las Flores de Greta su hermana Nuria, experta artesana joyera y sombrerera; y Antía Vargas, ingeniera industrial.
El nombre de la tienda responde a la necesidad llamarle de alguna manera a su cliente ideal, una mujer respetuosa con la naturaleza, feminista y concienciada a nivel social. “Estuvimos pensando cómo sería nuestra clienta ideal, a la que llamábamos Greta y al final nos gustó para el nombre de la tienda”, explica Uxía Benlloch. Tal y como dicen en sus redes sociales, Greta “eres tú”.