La urbanización del polígono 1 de Navia avanza con rapidez y, si hace cuatro semanas emergía la primera de las calles, en la recta final del mes de octubre ya son visibles las principales arterias que conformarán el entramado de viales de esta nueva ampliación del barrio.
Por ahora, son las calles principales las que ya se han abierto camino en los solares y, mientras que en la primera de ellas ya se están colocando los bordillos de las futuras aceras, en otras de las anexas a Pedra Seixas se han aplicado ya las primeras capas de asfalto y otras todavía están en tierra.
Así a lo largo de los casi 100.000 metros cuadrados que conforman el ámbito de actuación, en el que los nuevos viales ya están totalmente diferenciados y se pueden contemplar tanto desde el nuevo barrio como desde la Rúa de San Paio.
La nueva calle que será la continuación de la Rúa das Ufas, tras la rotonda del cruce con Pedra Seixa, es la que está más avanzada en el ámbito. Competirá en importancia con la que se erigirá de forma paralela a Pedra Seixa y la Rúa de San Paio, en la mitad del polígono, con 390 metros de longitud.
Esta última tiene la característica especial, por tanto, de articular el viario de las nuevas etapas de desarrollo del Plan Parcial en conexión con la trama del núcleo de Navia, y en interrelación al mismo tiempo con el nuevo desarrollo urbano del polígono. El fin de este vial es, por tanto, convertirse en espacio público de cohesión de la vida de la nueva trama residencial –una «nueva Teixugueiras»– y, además, irá acompañado a su vez por un carril bici.
Los viales acaban de abrirse paso y, por ahora, sus nombres no se asemejan a los que ya lucen las otras calles del polígono: Poza do Cabalo, Ufas, Lamelas, Pedra Seixa, Limpiño o Teixugueiras. Así, la veintena de calles que se ejecutarán en el polígono 1 del barrio de Navia se denominan V-IV y a partir de ahí un número o una letra, por lo que entre ellas están las vías principales V-IV-1, de casi 400 metros, o una de las transversales, de menor entidad, V-IV-J, por ejemplo.
La recta final de la urbanización del polígono 1 coincidirá además con el inicio de las obras de los primeros edificios que conformarán la nueva silueta del barrio, por lo que es prioritario que, cuando antes, se acometan los viales que, como máximo, tendrán pendientes de hasta el 6%, facilitando la movilidad peatonal entre el nuevo y el viejo San Paio de Navia y la circulación de los ciclistas.
Además, en los márgenes de las nuevas calles se crearán algo más de 450 aparcamientos públicos en superficie, 14 de ellos para personas con movilidad reducida.
La conexión con la ciudad, pendiente
Por ahora, estos viales permitirán articular el polígono y unificar por completo el barrio de Navia, pero la futura urbanización de los polígonos 2 y 3, que comprenden las etapas pendientes de desarrollo, posibilitará solventar algunos problemas de comunicación del barrio.
Entre otras actuaciones, se abrirán dos nuevas conexiones con la Avenida de Europa que permitirán la salida del polígono, una de ellas a través de una glorieta.
Otra demanda pendiente es abrir una conexión peatonal y paisajística con el parque lineal de la Avenida de Castelao-Avenida de Europa a través de una futura zona verde.
Por otra parte, en el proyecto de urbanización también se incluye una medida para tratar de resolver el problema actual del acceso al Colegio Amor de Dios, a través de un vial con aparcamientos en batería en ambas aceras que asumirá la necesidad de espacio en las horas punta de acceso y recogida del colegio.