Se esperaba que pudieran comenzar antes de que acabara 2022, pero ha empezado 2023 y las máquinas todavía no han tomado el Barrio do Cura. El proyecto de urbanización de esta zona de Vigo, y la posterior construcción de viviendas, da aún sus últimos coletazos administrativos. Aunque el grueso burocrático acabó el año pasado y el proyecto de urbanización de suelo urbano no consolidado ya recibió luz verde, el Concello todavía debe concluir el análisis de los proyectos presentados para la concesión del permiso de obra. Una tramitación que se anunció hace dos meses y medio.
Según reveló este viernes el alcalde, Abel Caballero, Urbanismo está “estudiando la propuesta final para licencia y por tanto estamos en el último paso”. El regidor vigués prefirió no dar plazos concretos para el inicio de los trabajos sobre el terreno porque “las fechas las carga el diablo”, pero anticipó que “va a ser muy rápido”. “Estamos al borde de que se inicien las obras en esa importante actuación urbanística en Vigo”, añadió.
Caballero informó también de que la Gerencia de Urbanismo aprobará el próximo martes la normalización de parcelas en el ámbito de suelo urbano en el Barrio do Cura. Un trámite que, a efectos prácticos, se traducirá en la cesión de viales por parte del Ayuntamiento a la empresa promotora de la reurbanización.
La compañía se encargará de ampliar las calles Santa Marta, Llorente y una parcela de Pi y Margall y deberá compensar económicamente a la administración local con una cifra superior al medio millón de euros. Este paso administrativo requerirá de un mes de exposición pública. “Estamos encantados”, declaró este viernes el alcalde, ya que Vigo no solo recibirá dinero sino que verá cómo la zona se reforma sin coste.
Y es que el Ayuntamiento de Vigo está muy interesado en esta actuación por muchos motivos. Además de dar salida a un histórico proyecto y recuperar una zona degradada, las obras revertirán en la ciudad nuevas conexiones viarias, humanizaciones, una plaza de 3.000 metros cuadrados, una escuela infantil o un aparcamiento público, entre otras cosas. Todo ello sin coste para las arcas municipales. Se calcula que Gestilar invertirá unos 4 millones de euros.