Las obras para prolongar las rampas mecánicas de la Gran Vía de Vigo ya tienen fecha de inicio. Será justo después de que la ciudad apague sus luces de Navidad. Ese punto final para el alumbrado está previsto para el 9 de enero, así que los trabajos podrían comenzar a mediados de ese mes. Así lo avanzó este jueves el alcalde, Abel Caballero, que incluso precisó que las labores podrían haber empezado “de forma inmediata” pero, según señaló, es preferible esperar al “día siguiente al que apaguemos las luces”.
Si las obras no han arrancado ya es porque se generaría un “perjuicio” para el comercio de la zona en una campaña tan importante como la de Navidad. Además, se “colapsaría” la ciudad si esa instalación de cintas mecánicas coincidiera con la reforma de los accesos de la AP-9 junto al Vialia Vigo, que podría durar hasta principios de 2022. En este sentido, Caballero recordó que la remodelación de la Avenida de Madrid tendrá que aguardar a su vez por las rampas de la Gran Vía, también por los mismos motivos de tráfico.
Esta extensión de las cintas discurrirá entre las calles Venezuela y Nicaragua. Con un presupuesto de 4,3 millones, se actuará en 150 metros lineales correspondientes a los diferentes tramos del bulevar. El Concello ha solicitado fondos europeos para financiar una iniciativa en la que ya se han invertido 5,5 millones.
Respecto a la Navidad, el alcalde también adelantó que se ampliará la “parte utilizable” de la Porta do Sol para uso ciudadano. De esta forma, los trabajos en el lugar dejarán paso al trasiego de peatones. Con esta medida, se quiere dar “más fluidez” y “estar preparados” para recibir una importante afluencia de gente en el centro de la ciudad.