Vigo pudo sacudirse un poco la lluvia este miércoles por la tarde. Aunque cayeron algunas gotas por la mañana, la acumulación de precipitaciones apenas rozó los 3 litros por metro cuadrado. También la jornada del martes fue algo más llevadera que las anteriores. Pero el regreso de los chubascos persistentes es un hecho y Meteogalicia ya ha activado el aviso amarillo para el viernes.
Hasta entonces, la lluvia será débil o intermitente, pero se espera que en la medianoche del 27 al 28 de octubre aumente su intensidad. La alerta permanecerá vigente entre las 00.00 y las 12.00 horas del viernes porque se aguardan 40 litros por metro cuadrado en ese lapso de tiempo. Además, el viento volverá a acompañar con cierta fuerza.
“El paso de un frente muy activo dejará un episodio de lluvias muy intensas en puntos del oeste de Galicia en la primera mitad del día. De cara al final de la jornada, los vientos soplarán de nuevo con mucha intensidad”, resume la agencia meteorológica.
El aviso por precipitaciones se hace extensivo a los municipios del entorno: Mos, Redondela, Nigrán, Baiona, Gondomar, Oia, Cangas, Moaña y Pazos de Borbén. También al resto del litoral atlántico, donde además el viento puede superar los 80 kilómetros por hora. Por ello, se ha activado igualmente el aviso amarillo en el mar.
La situación podría empeorar el sábado. Todavía no hay alertas para ese día porque aún es pronto, pero el pronóstico del tiempo prevé aguaceros de mayor calado a lo largo de todo el día. Nuevamente, con rachas fuertes en la costa y en tierra. La inestabilidad irá a menos durante el domingo.
El parte a medio plazo augura una mejoría progresiva que empieza a verse con buenos ojos. La sequía va quedando atrás y la ciudad de Vigo ya encadena 14 días consecutivos, desde el 13 de octubre, con algo de lluvia, en mayor o menor medida. En este tiempo, se han acumulado 209 litros por metro cuadrado. Una cantidad que sin duda ha contribuido a paliar la sequía existente.
La Oficina Técnica de la Sequía se reunirá esta semana para valorar el estado de los embalses y del caudal de los ríos, que han mejorado sustancialmente. Así, se espera que se introduzcan modificaciones en los actuales estados de alerta y prealerta. La presa de Eiras ya está al máximo previsto para esta época del año (en torno al 80%). Mientras, Zamáns y Baíña recuperan reservas a menor ritmo y rondan el 50% de ocupación.