Ni la lluvia, ni el viento, ni el frío. Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente soportaron de forma estoica las malas condiciones meteorológicas que azotaron este miércoles, 5 de enero, la ciudad. La cabalgata «estática» viguesa empezó más tarde de los previsto, pero se celebró sin ningún problema. La idea era comenzar a las 11:00 horas, aunque la intensa lluvia no dio tregua durante toda la mañana.
Finalmente, sobre las 14:30 horas se abrió el recinto de la Avenida de Castelao, que estuvo disponible para los niños vigueses de forma ininterrumpida hasta las 21:30 horas. Tras el anuncio definitivo efectuado a mediodía de este mismo 5 de enero, las nubes dejaron de echar agua -con la salvedad de algunas gotas sueltas- e incluso fueron desapareciendo por momentos.
Aunque el tráfico y los comunicados de última hora complicaron la llegada a la Avenida de Castelao, los Reyes Magos pudieron recibir al alcalde, Abel Caballero, y dar comienzo al evento con el discurso del regidor por la megafonía.
No se produjeron colas en ninguno de los tres carriles existentes para disfrutar de este formato estático, que repite por segundo año consecutivo debido a la pandemia. Así pues, las familias empezaron a desfilar por delante de Melchor, Gaspar y Baltasar. Al final recibían caramelos de regalo. Los Reyes Magos guardaban un parecido razonable con diferentes personas de la ciudad.
Parecidos razonables
En esta primera tanda de la cabalgata, Melchor era similar a Iván Pérez, del Lavadores Balonmano; Gaspar era como Fran, del Alerta Navia Fútbol; y Baltasar se asemejaba a un jugador del Rápido de Bouzas. Por su parte, la Cartera Real tenía un aspecto que recordaba a Begoña Aldao, presidenta del Sárdoma FC.
Según se contaba en el lugar, más adelante Melchor se parecerá a David Parada, organizador de la San Silvestre viguesa; Gaspar a Carlos Borrás, del Cristo da Victoria; y Baltasar al ya popular Ibrahima. Mientras, la Carteira Real se parecía mucho a la exitosa deportista Susana Rodríguez Gacio.
Entrega de llaves
A las 19:30 horas se celebró el acto de entrega de llaves de la ciudad en la zona del palco. Desde ese momento, los Reyes Magos ya disponían de todo lo necesario para repartir sus regalos a los más pequeños.