Tras la apertura de las nuevas rampas mecánicas de la Gran Vía, el pasado 24 de marzo, es el turno de la cinta transportadora que se ha instalado en la calle Carral. Las obras parecían avanzar a buen ritmo pero faltaban unos elementos fundamentales: los pórticos que las cubrirán. Las piezas no han llegado hasta esta semana, por lo que no se ha podido cumplir el deseo de Abel Caballero, que quería poner en funcionamiento este nuevo sistema de movilidad a finales de marzo.
No obstante, pudo fotografiarse en la obra a finales de febrero. Fue entonces cuando anunció que se reprogramaba el final de los trabajos. Poco antes había anunciado el estreno de esta rampa mecánica para junio. Repentinamente, esa fecha se adelantó un par de meses. En aquella visita a la calle Carral, el alcalde de Vigo también desveló que los pórticos tendrían un color poco habitual. Serían oscuros.
Según explicó, el Concello de Vigo quería que fuesen rojos, como los de la cercana calle Segunda República, pero la Dirección Xeral de Patrimonio obligó a escoger una gama más neutra para adecuarse al entorno. Caballero dejó claro que aquella imposición iba en contra de su parecer y, para cargarse de razón, señaló el rótulo rojo de un local de hostelería situado al lado.
Sin embargo, ha habido que asumir el cambio y este martes empezaron a instalarse dichos pórticos a lo largo de los 27 metros de longitud de la rampa. Este cometido proseguirá este miércoles. A continuación, se colocarán los habituales vidrios transparentes. Queda también crear una zona ajardinada y acondicionar el resto del entorno.
La rampa mecánica, que previsiblemente se pondrá en funcionamiento en mayo, permite subir sin esfuerzos la pendiente de 5 metros existente entre Marqués de Valladares y la Porta do Sol. Esta actuación forma parte del proyecto de soterramiento del tráfico, en el que se invierten 17 millones de euros. El gran escollo de la transformación de este espacio urbano pasa ahora por la prolongación del túnel. En este sentido, siguen las labores para definir el trazado del paso subterráneo hasta el futuro Barrio do Cura, un proyecto que también avanza a paso lento.
Además, el alcalde de Vigo mostró recientemente su deseo de seguir peatonalizando el centro de Vigo. Tal y como ya había anunciado hace unos meses, su intención es continuar hasta la zona de Alfonso XIII y la iglesia de Santiago de Vigo. Así, se crearía una enorme zona dedicada exclusivamente para los viandantes.