Cerca de 150.000 vehículos conforman el parque automovilístico de Vigo y buena parte de ellos arrastrarán limitaciones de acceso a cuatro áreas de la ciudad una vez que entren en funcionamiento las zonas de bajas emisiones (ZBE). Según datos del portal especializado Sumauto -que integra a Autocasión, AutoScout24, Unoauto y RentingCoches-, el 36,2% de los vehículos se verán afectados en Vigo por esta normativa de obligada aplicación en los municipios de más de 50.000 habitantes.
Estamos hablando de 53.486 automóviles que verán comprometida su circulación en la ciudad olívica al no disponer de etiqueta. A esto habrá que añadir en un futuro -a medio y largo plazo- los que tengan distintivos B (amarillo) o C (verde) para cumplir la Ley de Cambio Climático, que entrará en vigor el próximo año si no hay moratorias.
Vigo será una de las ciudades gallegas con más porcentaje de vehículos afectados, solo por detrás de Ourense (40,80%) y Pontevedra (37,20%). Santiago de Compostela es la urbe de la comunidad autónoma con menor ratio de coches de más de 20 años (32,1%).
Esos más de 50.000 vehículos sin etiqueta no podrán transitar por las cuatro zonas de bajas emisiones diseñadas por Vigo (centro y los entornos de Praza de Portugal, Bouzas y O Calvario). No obstante, aún quedan detalles por pulir dentro de la regulación que sacará adelante el Concello. Por ejemplo, la fecha de puesta en marcha de la medida, los horarios de prohibición de entrada o cómo se aplica a profesionales y residentes.
La entrada y salida a dichas áreas estarán controladas, al igual que sucede en otras ciudades españolas, por cámaras que se valen de última tecnología para leer matrículas y comprobar si los vehículos pueden acceder o no a las ZBE.
El alcalde, Abel Caballero, ha pedido esta misma semana desde su puesto de presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) una moratoria para la activación de estas zonas, ya que hay muchos ayuntamientos que están teniendo dificultades para sacarlas adelante y porque se aprecian problemas jurídicos en el desarrollo de la norma.
Obligación legal
La creación de las ZBE responde a mandatos de las autoridades europeas y españolas y contemplan un régimen sancionador. Cada vehículo tiene una catalogación según su grado de contaminación, que se puede consultar en la web de la DGT. Estas etiquetas resultan fundamentales porque son las que se otorgan para determinar si se puede o no entrar en las ZBE. Hay cinco categorías según las emisiones:
- Sin etiqueta: vehículos de gasolina matriculados antes de 2001 y de diésel anteriores al 2006.
- Etiqueta B (amarilla): coches de gasolina matriculados después de 2001 que cumplen con la norma Euro III y vehículos diésel matriculados después de 2006 que cumplen con las normas Euro IV y V.
- Etiqueta C (verde): coches de gasolina que cumplen con la norma Euro IV y que están matriculados después de 2006 y coches diésel que se matricularon después de 2015 y que cumplen con Euro IV y V.
- Etiqueta ECO (azul y verde): todos los vehículos híbridos (gasolina o diésel y eléctricos) que sean enchufables con autonomía eléctrica menor a 40 kilómetros por hora. Los impulsados por gas natural, comprimido o licuado del petróleo y que cumplan con las normas de la etiqueta C.
- Etiqueta Cero Emisiones (azul): los vehículos electrificados que tengan una autonomía superior a 40 kilómetros por hora, sean eléctricos, híbridos o eléctricos con autonomía extendida.