Octubre se estrenó en las islas Cíes con dos llenos. Los pasados sábado 1 y domingo 2 de octubre accedieron al archipiélago vigués el máximo de 450 personas autorizado cada día, bajo un sistema de acceso “sin control alguno”, tal y como han vuelto a denunciar las navieras que gestionan el transporte marítimo en la ría de Vigo.
En un comunicado conjunto, Naviera Mar de Ons, Naviera de las Rías Gallegas, Rutas Rías Baixas y Cruceros Rías Bajas han vuelto a pedir a la Xunta que controle el acceso del destino natural más importante de Galicia. Las compañías llevan varios años denunciando irregularidades en un sistema “poco transparente” que “va en contra de la libre competencia”.
Las empresas califican como opaco el proceso de gestión de las autorizaciones para quienes quieren acceder a partir del 15 de septiembre a las islas del Parque Nacional das Illas Atlánticas y denuncian el “nulo” control que hay al desembarcar, a pesar de que “es obligación según las normas del parque portar el correspondiente documento de identidad para el acceso”.
Las navieras han puesto en manos de Competencia la entrada de personas con nombres ficticios. Esta decisión se produce después de que, estas mismas navieras, ya hubieran detectado anteriormente otras prácticas semejantes en las que denunciaron la venta de billetes a las islas una vez que el cupo se encontraba cerrado. La Dirección Xeral de Patrimonio Natural decidió entonces también poner el asunto en manos de Competencia y de la Dirección Xeral de Mobilidade.
Este sistema, además, impide a las navieras que puedan poner a la venta online con su autorización correspondiente los billetes para los visitantes que acceden en la única modalidad disponible que existe a partir del 15 de septiembre. “La central de reservas deja de estar disponible para estos visitantes que quieren conocer el parque nacional en esta época, con un mensaje que desconcierta a los interesados y que en lugar de incitar las visitas fuera de la época estival, disuade de visitarlo ya que se muestra el siguiente mensaje: no está autorizado el transporte regular”, exponen las compañías, que han difundido un vídeo como prueba de la falta de supervisión a la hora de entrar en Cíes.
La consecuencia de esta falta de control en el acceso es, según argumentan, que “cualquier empresa” puede acaparar con antelación autorizaciones para sustraerlas del mercado y ponerlas en circulación cuando mejor le convenga con claro perjuicio a otros usuarios y al resto de navieras. Los pasajeros viajarían así con una autorización a nombre de un tercero.
El acceso al parque nacional con nombre ficticios e identidades supuestas, ocurrido en el mes de agosto y evidenciado por las navieras es la “punta del iceberg” de “cientos de autorizaciones expedidas utilizando fraudulentamente con nombres y apellidos de personas inventadas o que pertenecen a bases de datos y que han podido viajar en alguna ocasión a Cíes pero que sus datos se siguen utilizando para acaparar autorizaciones con anticipación”.
“Sólo ha sido noticia el fraude del 24 de agosto porque el autor ser burló del sistema y del control en los accesos usando nombres de actores de Hollywood, pero esto sucede a diario con personas con datos ficticios que entran en el parque nacional sin control”, apuntan las navieras.