La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha expedido una orden nacional e internacional de búsqueda y detención de Segundo Cousido Vieites, un sacerdote salesiano condenado a 32 años y medio de cárcel por abusar de seis menores de un centro escolar de Vigo, y que no ha comparecido en plazo en el centro penitenciario para cumplir su pena.
El tribunal provincial ha emitido este viernes un auto en el que acuerda expedir esas órdenes de detención e ingreso en prisión, tanto a nivel nacional como internacional, después de que el condenado no haya ingresado en prisión voluntariamente y se encuentre en paradero desconocido.
El salesiano fue condenado en 2021 por abusar sexualmente de seis menores pero los numerosos recursos presentados por su defensa retrasaron el inicio de la ejecución de la sentencia. Dicha ejecución estuvo suspendida hasta noviembre pasado y los trámites que se iniciaron después también fueron recurridos.
El proceso se alargó hasta finales de febrero pasado y, en ese momento, la Audiencia dio al condenado un plazo «inaplazable» de tres días para ingresar en prisión a cumplir la pena impuesta. «Al no constar que el condenado se haya presentado en prisión para cumplir la pena privativa de libertad impuesta, la Audiencia ha emitido una orden de búsqueda y captura», señalaron fuentes judiciales a principios de marzo.
«Huido» para no entrar en prisión
El 13 de marzo, la Guardia Civil de Cambados comunicó al tribunal la imposibilidad de dar cumplimiento a esa orden de detención al no haber conseguido localizar a Segundo Cousido en su domicilio (ni en ningún otro lugar). En su informe, los agentes constataban que el religioso «ha huido con la única intención de sustraerse a la acción de la justicia y evitar el cumplimiento de las penas privativas de libertad a las que fue condenado».
La Audiencia, tras recibir ese informe, ha acordado expedir las órdenes de detención e ingreso en prisión de ámbito nacional e internacional, las cuales deberán ser incluidas en el Sistema Integrado de Registros Administrativos de Apoyo a la Actividad Judicial (SIRAJ) para su plena efectividad.
Además, han informado fuentes judiciales, el tribunal ha requerido a la Comunidad Colegio María Auxiliadora Salesianos, que prestó el día 30 de abril de 2020 una fianza de 12.000 euros para garantizar la libertad provisional del sacerdote, que, en su condición de entidad fiadora, en el plazo de diez días presente al condenado ante la Audiencia Provincial de Pontevedra para la ejecución de la sentencia. Las juezas indican que, en caso de no hacerlo, adjudicarán la fianza al Estado.
Juicio y condena
Segundo Cousido Vieites, sacerdote y encargado de actividades extraescolares en el colegio de los Salesianos en Vigo, fue juzgado en julio de 2021 en la Audiencia Provincial de Pontevedra.
En octubre de ese año, el tribunal dictaba sentencia condenando al procesado a penas que sumaban 32 años y medio de cárcel, y a 36 años de libertad vigilada, por haber abusado sexualmente de seis menores, alumnos de ese colegio religioso. Además, estableció la prohibición de acercarse y comunicarse con sus víctimas entre 4 y 9 años, y también fue inhabilitado durante 31 años para el ejercicio de cargo, profesión u oficio que requiera contacto con menores.
La Audiencia consideró probado que, durante un campamento en la localidad de Cambados, en una peregrinación a Santiago de Compostela y en la sede de una asociación juvenil vinculada al colegio, el acusado realizó tocamientos en los genitales a varios menores, aprovechando su condición de superioridad, al ser profesor de los jóvenes y monitor en sus actividades extraescolares.
En total, la Audiencia señaló que fueron seis los chicos afectados, y que sobre ellos el procesado cometió siete delitos de abusos sexuales, tres de ellos continuados. En todos los casos, señaló el tribunal, se dio la circunstancia agravante de abuso de superioridad.
Los magistrados otorgaron credibilidad al testimonio de los menores y rechazaron que hubieran denunciado los hechos guiados por un ánimo espúreo o por interés de perjudicar al encausado. Al contrario, en su resolución recordaron que el acusado «no era solo un profesor, era su amigo, su referente» y los menores no ganaron nada denunciando los hechos, sino que, por contra, «sufrieron las insidias y menosprecios de otros compañeros que los llamaron mentirosos».
En mayo de 2022, el TSXG ratificó la condena y rechazó el recurso presentado por el condenado, declarando firme la resolución en octubre.