La concesionaria municipal del transporte urbano del Concello de Vigo, Vitrasa, y el comité de empresa han terminado un nuevo encuentro de mediación sin acuerdo, por lo que se han emplazado a seguir negociando el próximo martes, día 27 de febrero.
Según ha informado el presidente del comité, Imanol Arnoso, la reunión ha terminado sin alcanzar ningún pacto ya que, ha dicho, «Vitrasa no presentó nada nuevo».
Tras finalizar sin ningún tipo de acercamiento la que es ya la quinta reunión entre las partes con presencia de una mediadora, para el próximo encuentro cambiarán de escenario y será en la sede de la Inspección de Trabajo donde dirección y representantes de la plantilla intenten alcanzar un acuerdo. Será el próximo martes, 27 de febrero, a las 14:30 horas.
Todo ello después de cinco encuentros de mediación llevados a cabo en las últimas semanas entre ambas partes sin que sirviesen, por ahora, para acercar posturas. El objetivo es poner fin a una huelga indefinida que comenzó a finales de noviembre y que este jueves ha cumplido 90 días.
A finales de enero Vitrasa aceptó de nuevo esta figura de un mediador que ayude a solucionar la situación.
Una vez más, como ya ocurrió a finales del año pasado, es una inspectora de trabajo la encargada de intermediar entre empresa y empleados.
Los trabajadores de Vitrasa llevan años protestando por la situación laboral que viven, debido a que el convenio colectivo caducó hace ya tres años, manteniéndoseles el sueldo congelado desde esa fecha, pese al incremento del precio de la vida tras la pandemia y de la propia subida de los billetes de bus.
Este sábado, 24 de febrero, los sindicatos con representación en el comité de empresa: CIG, UGT. CC.OO. y USO han convocado una manifestación en defensa del transporte público a la que han pedido que se sume la ciudadanía.
Vitrasa dice que su última oferta supone un coste de 1,2 millones
Tras el encuentro, desde la dirección de Vitrasa también han informado de que el comité de empresa «rechazó una vez más» la propuesta de la empresa realizada «con un esfuerzo máximo en un contexto económico muy complicado» para la compañía, dicen, cifrando en más de 24 millones de euros las pérdidas y en 26,5 millones menos, los viajeros desde 2019.
Según explican, la última oferta presentada al comité supone un coste para la empresa de 1,2 millones de euros, «un gran esfuerzo en la situación de pérdidas en la que se encuentra».
Consideran que el comité «sigue con una propuesta inasumible y con una actitud totalmente egoísta y de chantaje hacia empresa y haciendo rehenes a sus propios compañeros con presiones para no poder ejercer libremente su derecho a trabajar».
Vitrasa apunta duramente hacia los trabajadores dejando claro que «el objetivo del comité es seguir paralizando la ciudad con las manifestaciones previstas para mañana y el jueves y así forzar al Ayuntamiento a implicarse y que asuman sus condiciones como un chantaje claro por parte del comité de empresa que, recordemos, cuenta con las mejores condiciones del sector de la provincia de Pontevedra«.
Es por ello por lo que, insisten ante la representación de los trabajadores «en la necesidad de desconvocar la huelga indefinida lo antes posible para poder para recuperar la normalidad en el servicio y así recuperar viajeros, que es lo único que permitiría poder mejorar la oferta realizada ya que es la base de los ingresos de la compañía».
«El comité es consciente de esta situación pero prefiere seguir adelante con los paros perjudicando al colectivo de la ciudadanía, a los compañeros y a la empresa», señalan, reiterando así «la necesidad de desconvocar la huelga indefinida para poder continuar con la negociación del convenio colectivo en un clima de normalidad para todos».