Tras el comunicado que el Concello de Vigo remitió en la tarde de este lunes para dar explicaciones sobre la tramitación de las atracciones de feria y la situación concreta del «saltamontes» de las fiestas de Matamá, los grupos municipales de la oposición, PP y BNG, siguen con más dudas que certezas.
Y es que según apuntan ambas formaciones, no entienden cómo no se ordenó el precinto de la atracción si, como bien apuntan desde el gobierno municipal, el aparato no contaba con la pertinente autorización incumpliendo así la normativa vigente.
De hecho, el BNG va más allá y este martes ha registrado una solicitud formal dirigida al alcalde Abel Caballero para que proceda a la convocatoria extraordinaria y urgente de la Comisión Informativa de Seguridad y aclarar así lo sucedido.
El portavoz municipal del BNG de Vigo, Xabier P. Igrexas, demanda en ese escrito la comparecencia tanto de la concejala de Seguridad, Patricia Rodríguez, como de su jefe de servicio, Antonio Vivero, para «dar todas las explicaciones en detalle» y esclarecer la actuación de los servicios municipales con carácter previo y también en la intervención además de someterse a las preguntas e interpelaciones de los grupos de la oposición.
Y es que para el nacionalista, por ahora desde el gobierno local, solamente hay «opacidad y silencio» matizando que el comunicado emitido por el Concello «lo único que genera» son «más preocupantes preguntas”. Entre ellas, la «más importante», señala, es que si la atracción no contaba con la autorización pertinente «¿Por qué no se ordenó a la Policía Local que la precintase?, interpeló.
Para Igrexas, lo que hace el gobierno local es «evitar asumir responsabilidades y dirigir las culpas a la comisión de fiestas», apunta. Y señala a continuación que ante la gravedad del suceso «no se puede despachar con comunicados enlatados sin atender preguntas y sin dar explicaciones», concluyó.
«No fue hasta el 1 de agosto cuando se advierte de la falta de documentación»
Mientras, desde el grupo municipal PP han ido en la misma línea definiendo como una «clara dejación de funciones» la supervisión de la atracción accidentada.
Así, al portavoz municipal, Miguel Martín, no le convencen las explicaciones sino todo lo contrario, pues en su opinión generan «mayor inquietud» apuntando a una «falta de explicaciones públicas» por parte de a quien corresponde velar por el correcto funcionamiento de estas instalaciones, y a su deber de vigilar, «que debe ir más allá del cumplimiento estricto de la normativa».
Es por ello por lo que se cuestiona también por qué no se dio orden a la Policía Local de llevar a cabo acciones inmediatas ante la falta de documentación y de autorización acorde a la normativa. «¿No debería haber instado a su inmediata paralización y/o precintarla?”, se pregunta Martín. Y sigue: “Resulta cuando menos sorprendente que pretenda ahora lavarse las manos descargando toda la responsabilidad, cuando él mismo reconoce que la atracción siniestrada no cumplía con la normativa vigente al no tener presentada toda la documentación”, subraya.
Y además, pone el foco en que esta misma atracción estuvo ya en las fiestas de Santa Ana de Beade una semana antes, explicando que la petición para la instalación de ambos festejos se hizo el mismo día, el 24 de julio, y que no fue hasta el 1 de agosto, «una vez terminadas las fiestas de Beade, cuando el Concello advierte de la falta de documentación al propietario».
“¿Qué sentido tiene exigir el cumplimiento de una normativa si luego, ante el evidente incumplimiento de la misma, no hacen nada y se lavan las manos?”, reflexiona el popular, quien insiste en pedir mayores explicaciones al gobierno de Abel Caballero, exigiendo información «públicamente y al detalle» sobre lo sucedido. “No es de recibo que pretenda lavarse las manos en este asunto, tratando pasar de puntillas por el mismo”, remacha.
La Policía Local se personó en la tarde del 2 de agosto
Con todo, desde el gobierno local hicieron público un nuevo comunicado este martes insistiendo en que «tanto el titular de la atracción como la Comisión de Fiestas de Matamá tuvieron notificación escrita de la falta de autorización para la puesta en funcionamiento de la atracción por no atender los requerimientos de documentación», subrayan.
Con ello, explican que, tras enviar dicha notificación, la Policía Local se trasladó al lugar de las fiestas en la tarde del viernes, 2 de agosto, previa al accidente, señalando simplemente que «no detectó actividad».
En cualquier caso, consideran, «este trágico suceso está siendo investigado por el Juzgado que cuenta con toda la colaboración del Ayuntamiento de Vigo», finalizan.