El Pleno de la Corporación del Concello de Vigo ha aprobado inicialmente este miércoles en sesión extraordinaria, con los únicos votos del Partido Socialista, los presupuestos de 2022, que con 285,5 millones de euros son los mayores de la historia de la ciudad. Partido Popular y Marea de Vigo han presentado sendas enmiendas a la totalidad, que han sido rechazadas por el pleno, al igual que las 83 enmiendas parciales presentadas por el BNG.
Los presupuestos fueron presentados por el concejal de Hacienda, Jaime Aneiros, quien dijo de ellos que son “reactivadores, incentivadores de la actividad económica, del dinamismo que tiene la ciudad, garantes de servicios públicos de calidad y equilibrados no sólo en términos económicos sino también sociales”.
Según Aneiros, se trata de unos presupuestos que “tienen de todo y para todos” y que destacan por su solvencia, porque “se hacen con deuda cero, sin recurrir al endeudamiento con los bancos”. El edil ha subrayado que en este momento de salida de la pandemia “es preciso poner todas las capacidades al servicio de la ciudad” y ha afirmado que “285,5 millones no solo es garantía de los servicios públicos de calidad de la ciudad sino que también impulsa el empleo, el comercio, el deporte y la cultura, y son una garantía de la proyección de las personas y de nuestro ecosistema”.
El concejal ha hecho especial incidencia en la inversión productiva para dinamizar sectores económicos especialmente afectados por la pandemia, con un paquete de inversiones que supera los 40 millones de euros, y ha recordado que ahora mismo hay en ejecución más de 80 millones de euros en la ciudad. También ha destacado el presupuesto para política social, de 22 millones de euros, y ha añadido que “no hay límite” en función de las necesidades de la ciudadanía.
No han convencido los argumentos de Aneiros al PP, que ha presentado una enmienda a la totalidad porque, según su portavoz, Alfonso Marnotes, estos presupuestos son “papel mojado, nacen muertos, nacen para no ser ejecutados, como los de 2021”. También ha dicho que se trata de los presupuestos de “por si acaso; por si acaso el Gobierno se pone a trabajar y decide ejecutarlos” y ha subrayado que “las inversiones pasan de presupuesto a presupuesto y que nunca se ejecutan”.
El líder de los populares vigueses ha afeado al Gobierno la falta de ayudas a la hostelería y al pequeño comercio, ha señalado que la partida para política social es escasa y ha criticado que se haya reducido un 25 por ciento la partida destinada a la promoción de empleo, cuando el once por ciento de los vigueses en edad de trabajar está en el paro, dos puntos más que la media de Galicia.
También ha lamentado que 301 plazas de empleo público, funcionarios que garantizan los servicios públicos de calidad, estén sin cubrir, y ha vuelto a criticar que el gobierno de Abel Caballero continúe recaudando impuestos para llenar unas arcas municipales que no es capaz de vaciar.
“Sí dispondrán de ingresos ingentes, porque tenemos los impuestos más altos de Galicia, Impuesto de vehículo más alto de Galicia, el IBI casi al máximo”, ha dicho Marnotes, quien ha justificado la enmienda a la totalidad de su partido porque “hay en desequilibrio enorme entre lo que el Gobierno exige a la ciudadanía y lo que el Gobierno se exige a sí mismo”. Según el PP, los presupuestos son “un corta pega de un año para otro, de partidas, de presupuestos, de políticas que no dan resultados”.
Marea de Vigo y BNG
La otra enmienda a la totalidad la ha presentado Marea de Vigo, cuyo portavoz, Rubén Pérez calificó la exposición de Aneiros de “spot publicitario que está muy bien para vender la ciudad en Fitur”. Si su formación presentó una enmienda a la totalidad es porque el margen que deja el Gobierno para presentar en enmiendas es muy reducido, tan sólo a unos 16 millones de los 285,5 de las cuentas.
“Dicen que el presupuesto es histórico. Lo va a ser más porque se le va a sumar superávit, devolución del IVA, recursos del Estado, fondos europeos y remanentes. Este presupuesto va a superar los 360 millones de euros que ya manejan este año”, ha dicho Pérez, quien ha asegurado que no se van a ejecutar, como ya está sucediendo con las cuentas de este ejercicio en curso.
Pérez ha criticado que el Gobierno meta en política social “absolutamente todo” pero que, en realidad, las partidas sociales finalistas, “que son las que importan”, suponga 65 euros de gasto social al año por habitante, muy lejos de los cien que serían deseables y uno menos que en los últimos presupuestos.
“Este presupuesto no tiene ninguna diferencia con presupuestos anteriores a la pandemia”, ha señalado Pérez, que ha comparado las iniciativas sociales de Vigo con las del resto de ciudades de España y que ha criticado que no existan líneas de ayudas al comercio local y autónomos, la desatención a las demandas del sector cultural o la cantidad de recursos que se van a empresas privadas como Vitrasa o Aqualia.
Por último, el BNG ha presentado 83 enmiendas parciales y ha lamentado no poder votar a favor de los presupuestos, como en otras ocasiones, porque no son buenos para la ciudad.
El portavoz de los nacionalistas, Xabier P. Igrexas ha dicho que se trata de unas cuentas “elaboradas en régimen de monólogo” que adolecen de inercia: “más de lo mismo, falta de proyecto y falta de ideas”. Para los nacionalistas los presupuestos son “electoralistas” porque contienen más “cemento inaugurable” y más “propaganda” pero “obvian que estamos en una grandísima crisis”.