Las calles Pedra Seixa, Poza Cabalo, Limpiño y Lamelas, en el polígono de Navia, se someterán a una profunda renovación en los próximos meses que le costará a la Xunta de Galicia un total de 4,3 millones de euros.
Así se desprende de la licitación que acaba de publicar el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) con el objetivo de llevar a cabo la contratación de las obras de renovación de los servicios urbanos en estas cuatro calles de la zona nueva de la parroquia viguesa, inmersa en estos últimos meses en recientes obras de urbanización por parte de la Xunta de Galicia.
Concretamente, el contrato publicado tiene un importe de 4.346.844,31 euros (IVA incluido) y las empresas interesadas en optar al mismo tienen de plazo hasta el 27 de septiembre para presentar sus ofertas.
Las tareas a desarrollar en estas cuatro calles del nuevo polígono residencial que -junto al principal vial de Teixugueiras- fueron de las primeras en urbanizarse de forma casi paralela al desarrollo de las viviendas, pasarán por llevar a cabo «grandes actuaciones» de renovación y reparación sobre las redes de saneamiento, fecales y pluviales así como sobre la pavimentación y la galería de servicios y alumbrado público.
Además, el proyecto comprende, a mayores de la renovación de los servicios urbanos, otras actuaciones como la reposición de la pavimentación en aceras y aparcamientos al mismo tiempo que una nueva capa de rodadura en los viales, con su correspondiente reposición de la señalización horizontal y vertical.
Pero la actuación también responderá a «nuevas necesidades» solicitadas por el Concello de Vigo, tales como la mejora de la eficiencia energética en la iluminación sustituyendo las lámparas actuales por luces led, una nueva ordenación en las ‘orejas’ de los aparcamientos en las calles Limpiño y Poza Cabalo además de una mejora de la seguridad vial con nuevos pasos de peatones sobreelevados, que se señalizarán adecuadamente, y que vendrán a sustituir a los actuales.
Todas estas medidas se llevarán a cabo en un ámbito de actuación que suma una longitud total de 1.105 metros siendo unas de las principales arterias de Navia donde se concentran una amplia variedad de servicios educativos, deportivos y sanitarios. Sobre estas cuatro calles giran el CEIP Castelao, el centro de salud, la iglesia parroquial, el centro de Alento o la Escuela de Arte Dramático así como el campo de fútbol o el complejo deportivo Máis que Auga.
Con todo, el plazo de ejecución de los mismos será de 12 meses, con lo que, siguiendo los trámites administrativos establecidos, los trabajos no comenzarán hasta finales de este año o principios del 2025, donde se desarrollará el grueso del presupuesto económico.
Calles a recepcionar por el Concello
Como bien apuntan desde el IGVS, estas cuatro calles forman parte de la primera fase de urbanización del Plan Parcial de Navia que tenía como objetivo generar suelo residencial para destinarlo a la construcción de viviendas que estuviesen acogidas a algún tipo de régimen de protección pública.
El primer convenio con el Concello de Vigo para este desarrollo se firmó en el año 1992 -el desarrollo del suelo residencial se incluyó en el Plan Xeral de Ordenación Urbana de 1993- siendo la superficie total del ámbito a generar de 728.069 m2.
En ella se llevó a cabo la urbanización de 463.933 m2 de superficie en la que se construyeron un total de 3.732 viviendas protegidas de las cuales, 384 fueron promovidas por el IGVS -el edificio conocido como ‘La Colmena’-, como vivienda de promoción pública, y donde se le cedieron al Concello un total de 35 pisos.
En estos momentos, la Xunta está inmersa en la segunda fase del desarrollo del Plan de Navia, con obras ya iniciadas y otras muchas en tramitación, donde se prevé la construcción de otras 1.600 viviendas.
Sin embargo, existe una parte de las obras de la primera fase de urbanización que todavía no fueron recibidas por el Concello de Vigo. Aquí entran las cuatro calles motivo de la actual licitación que, como bien reconocen desde el IGVS, «presentan deficiencias en su urbanización».
Así, tras conversaciones entre los técnicos municipales y autonómicos, visitas giradas a la zona, proyectos e informes de ambas administraciones, en el verano de 2022, la Gerencia Municipal de Urbanismo solicitó la realización de nuevas inspecciones para conocer el estado real de las infraestructuras de urbanización en el ámbito y, de ahí, se pidió actualizar las obras necesarias para que los viales «se encontraran en condiciones de ser recibidos» por el Consistorio vigués.
Con los últimos informes y la actualización del proyecto, el 5 de junio de 2024, el equipo redactor del mismo presenta la última versión, que fue supervisada por los técnicos del IGVS y que, finalmente, fue aprobada técnicamente el 3 de julio de este mismo año, con la consiguiente licitación de obras que se publica en estas fechas.
Tras ello, y una vez que las obras estén acabadas, será el Concello de Vigo el encargado de recepcionar los viales para que pasen a ser de titularidad municipal.