De esta manera, se quiere tener “todas las garantías” de que se encuentra en buen estado para su uso ciudadano. Aunque esta actuación no se podrá llevar a cabo de forma inmediata, el Concello acotará este ‘balcón’ con vistas a la ría para evitar riesgos.
Antes de ejecutar los trabajos, la administración local desarrollará el proyecto de la obra y también necesitará el permiso de la Xunta de Galicia, al encontrarse el paseo dentro del ámbito del Casco Vello.
En cuanto se disponga de esa autorización autonómica y del visto bueno del proyecto, se efectuará la reforma, que durará unos dos meses.