El Concello de Vigo ha mostrado en las últimas horas el aspecto que tendrán dos de las múltiples obras planificadas en la ciudad: la instalación de rampas mecánicas desde Ramón Nieto hasta el centro de salud de Lavadores y la reforma de la calle Pablo Iglesias, con reordenación del tráfico junto al estadio y las pistas de Balaídos.
En el primer caso puede llamar la atención la estética elegida, ya que se opta por extender el estilo de las rampas de la Gran Vía a otras zonas de la ciudad. Incluso a las parroquias. Las cintas que transportarán a la gente hacia el centro de salud o al CEIP Fonte Escura también tendrán una cubierta con pórticos de colores. Una solución que ya se contempló para una actuación similar en Teis.
El presupuesto de licitación se eleva a 1,8 millones de euros. Con este dinero se instalarán tres tramos de cintas mecánicas que sumarán unos 120 metros de trayecto -39 metros cada una-.
El proyecto fue aprobado hace once días y se espera que las obras empiecen en marzo de 2023 y, tras diez meses de trabajos sobre el terreno, acaben a principios de 2024. La reforma permitirá salvar una “enorme pendiente” que en algunos puntos alcanza el 12% de desnivel.
Además, se aprovechará para renovar los servicios de saneamiento y soterrar el cableado. Asimismo, se mejorará la eficiencia energética al renovar el alumbrado con luces LED. Igualmente, se contemplan nuevo mobiliario y espacios verdes con árboles.
Rotonda junto a Balaídos y humanización
El Concello de Vigo también contempla a medio plazo la humanización de una parte de la calle Pablo Iglesias. Concretamente, entre el cruce con Alexandre Bóveda y el número 24, aunque por ahora solo de un margen de la acera.
Una de las novedades en esta obra será la instalación de una rotonda en un punto conflictivo: la confluencia de Pablo Iglesias, Alexandre Bóveda, Olímpicos y Manuel de Castro.
El alcalde, Abel Caballero, anunció la semana pasada la reordenación del tráfico en este lugar con cargo al nuevo crédito extraordinario de casi 30 millones. Así pues, la actuación está pendiente de que los fondos reciban el visto bueno necesario y de que se complete la tramitación administrativa.
En todo caso, los trabajos para crear esta glorieta y para humanizar la calle Pablo Iglesias podrán empezar en 2023 y estar terminados cuatro meses después del inicio de las obras.
El presupuesto asciende a 1,2 millones de euros. Con este dinero se ampliarán y renovarán las aceras, además de ejecutar las habituales mejores de redes de abastecimientos o saneamiento. Igualmente, se acometerá el tradicional cambio de mobiliario urbano y de jardinería.